El poeta griego Eurípides de Salamina dijo: “Es más fácil dar consejos que sufrir con fortaleza la adversidad”.
La frase es válida para reflexionar acerca de la importancia de estar preparados, al menos en el ámbito espiritual, a fin de soportar las adversidades cuando lleguen, ya que si no actuamos con fortaleza sucumbiremos en las primeras tempestades que tengamos que afrontar en la dialéctica de la vida; ante las cuales, probablemente, no contemos con alguien que nos aconseje para aclarar el camino hacia la sobrevivencia terrenal.