El neurocientífico estadounidense Howard Gardner dijo: “Es tonto clasificar a los humanos en listos y tontos, porque cada uno de nosotros es único e inclasificable”.
Observemos que al medir la inteligencia de algunas personas, se descubre que unas son muy buenas solucionando problemas, pero malas explicándolos; y a otras les pasa todo lo contrario.
La idea es aprender todo el tiempo en vista de que se constituye en el único antídoto para aplazar la vejez.