La poetisa estadounidense Sylvia Plath sostuvo que “el peor enemigo de la creatividad es la duda”.
Para los débiles, dudar es desplomarse; para los fuertes, creer; y solo nos acercamos a la verdad mientras dudamos.
De lo anterior, la ciencia representa el mejor ejemplo, y en la cual la creatividad, en muchos casos, juega un papel relevante en el camino para llegar a la esencia de las cosas.