El filósofo chino Confucio dijo: “Elije el trabajo que amas y nunca tendrás que trabajar un día en tu vida”.
La aplicación de lo expresado anteriormente por el sabio oriental sería el punto de partida para despertar una conciencia social en la sociedad, en el sentido de la necesidad de trabajar, seriamente y de manera cohesionada en el rescate de los elementos que perfilen un reencuentro con los valores patrios.
Si escogemos como tarea el amor a la Patria, como lo hicieron Duarte y los demás trinitarios, entonces en la República Dominicana estaremos dejando atrás, la desigualdad social y, con ello, la criminalidad y la delincuencia; en un trabajo de amor cuya carga pasará desapercibida en nuestros hombros.