El poeta libanés Khalil Gibrán dijo que “por larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nubes”.
Estamos aquí ante un llamado de esperanza para estar preparados, a fin de que cuando llegue la oportunidad de alcanzar cosas, entonces podamos aprovecharlas.
La recompensa se encuentra en el esfuerzo, no en el resultado, dado el hecho de que si no existe el primero, el segundo se convierte en imposible.