Una lucha cerrada por la sede

Una lucha cerrada por la sede

Una lucha cerrada por la sede

Hugo López Morrobel

Aunque en los últimos días ha aminorado la batalla pública en el país para obtener la sede de la próxima Serie del Caribe, por lo bajo se mueven fuerzas huracanadas en círculos de poder político y económico.

No es un secreto que el alcalde de Santiago, Abel Martínez, realizó la solicitud de que se le adjudique a esa ciudad, tan pronto las Águilas Cibaeñas se coronaron campeones de la recién finalizada versión que se efectuó en Mazatlán.

Mientras tanto, en Santo Domingo mueven fichas para que la misma se celebre en el estadio Quisqueya Juan Marichal.

Es esa lucha de poder, la alcaldía de Santiago entiende que sería un triunfo que Martínez se imponga, no importa que sea por decisión o por nocaut, mientras que en la del Distrito Nacional, que preside Carolina Mejía, actual secretaria del Partido Revlucionado Moderno, se busca el mismo objetivo.

No se puede olvidar que Abel ya está siendo señalado como el posible candidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana para las elecciones de 2024, por lo que obtener la sede significaría una victoria, que aunque no se le vean matices políticos, en el fondo los tiene.

Un aspecto que no le beneficia al alcalde de Santiago es que de acuerdo a los informes, el presidente de la Liga de Béisbol, Vitelio Mejía, no está de acuerdo con designar desde ahora la ciudad sede del evento, aunque eso también está en manos de Juan Francisco Puello Herrera, presidente de la Confederación del Caribe.

Lo que habría que ver es si sería factible en Santiago, si el próximo campeonato lo obtiene otro conjunto, por ejemplo los de la capital o el Este del país.
Veremos en qué parará la cosa caballero, pero de que la lucha existe, es una realidad.