Las luchas o conflictos de intereses, la mayoría de ellas relacionadas producto de sacar ventajas de situaciones económicas o políticas, son frecuentes en todo el mundo, pero en nuestro país son más frecuentes, porque muy pocos están en capacidad de asimilar realidades que se originan a lo interno de las organizaciones a las que pertenecen.
En el aspecto político, todos conocemos al dedillo, como partidos que hasta hace poco eran verdaderos “monstruos” de masas, por ese tipo de batallas descarnadas hoy se han convertido en estructuras tan débiles, que están al borde de la desaparición definitiva.
Por ese mismo destino han transitado, penosamente, organizaciones sindicales que tenían tanta fortaleza que en cualquier momento tenían la capacidad de paralizar el país, pero hoy, producto de esa misma lucha de intereses, “desaparecieron del mapa”.
En el deporte la lucha de intereses se siente hoy con fuerza en el seno del Comité Olímpico, situación que advertimos hace unos meses que se veía venir.
Y así ha sido, allí se están generando conflictos que parecen insalvables, producto de intereses de los dos bandos que se disputan el poder.
Ese y no otro fue el detonante para botar a Luis Chanlatte, primer vicepresidente y eterno aspirante al trono, como enlace entre ese organismo y el ministerio de Deportes.
Es una lucha brutal, pensando cada grupo más en lo económico que en el deporte mismo.
RADARES.- En la NBA, hoy siguen las series de 76ers Filadelfia (2-3) v s Hawks de Atlanta (3-2), y Utah Jazz (2-3), frente a los Clippers de Los Ángeles (3-2). Ambas podrían acabar esta noche, pero hay posibilidad de que se produzca un empate y tengan que ir a partidos decisivos.