Ya es una tradición en el país que cuando se cumple el periodo por cuatro años de una administración gubernamental, se produzcan cambios en la mayoría de los estamentos de cierto nivel.
Ello trae como consecuencia que quienes están detrás de esas funciones motiven una recia y agresiva campaña dirigida a la opinión pública sobre las probables designaciones que hará el Poder Ejecutivo.
Para el ministerio de Deportes, que desde durante todo este cuatrienio se ha desempeñado como ministro Francisco Camacho, se barajan los nombres de más de una docena de aspirantes, unos miembros del partido gobernante, y otros que se llaman “ independientes”.
La guerra entre “compañeritos” por lograr que se les designe en esa posición es terrible, descarnada, cruel y desgarradora.
Habrá que esperar la última palabra del presidente Luis Abinader, quien es que tiene la sartén por el mango, para saber a ciencia cierta si el actual ministro continúa, o si se va para su casa.
Pero mientras el hacha va y viene, las especulaciones sobre el posible nuevo ministro de Deportes, seguirán siendo “el plato del día”.
RADARES.- El título que ayudó a obtener Al Horford a los Celctis de Boston, y convertirse en el único dominicano en lograr esa hazaña en la NBA, será por lo menos por unos días, un muro de contención a las críticas que francotiradores locales le han mantenido por mucho tiempo…El tiempo se acorta para el inicio del campeonato de béisbol, lo cual obliga a acelerar los trabajos del estadio Tetelo Vargas de San Pedro de Maçorís, que al parecer están a ritmo de tortuga…Felicitaciones para el colega Héctor J. Cruz, por la excelente producción del documental y el libro sobre la vida de Winston Chilote Llenas, gloria del béisbol dominicano.