Desde el mismo momento que se conformó el equipo de las Águilas Cibaeñas, representante de la República Dominicana a la Serie del Caribe de Mazatán, México, no me quedó la menor duda de que era un “trabuco” muy difícil de derrotar.
La calidad indiscutible de cada uno de los integrantes del mismo, me llevó a concluir que era muy probable que conquistaran el título, el numero 21 , de manera invicta, y así ocurrió.
Creo que en cierto sentido, pretender eso era una especie de atrevimiento, debido a que en béisbol, cualquier “bejuquito” amarra, y una muestra de de ello fue el excelente partido que realizó Panamá ante las Águilas en la parte semifinal de la serie.
Se podría decir, sin temor a equívoco, que fue un golpe de suerte sacar ese partido de la nevera, porque ni el más optimista pensó que ante esa precaria situación se podría salir por la puerta grande, tal y como ocurrió.
En el equipo hay muchos héroes, pero quiero destacar el trabajo ofensivo y defensivo de primer nivel que desarrolló el inicialista Ronald Guzmán.
Felicitaciones para los aguiluchos, y en especial para el dirigente Félix Fermín, quien se adjudicó su cuarto título, para convertirse en el más ganador de la historia en ese importante y delicado rol.
Cuando el equipo campeón llegue a Santiago, los aficionados tomen las cosas con mucha responsabilidad, porque el Covid se mantiene al acecho y no tiene caras bonitas, afecta a todos por igual.
RADARES. Felicitaciones para el coronel Diego Pesqueira, reconocido por su excelente labor de 35 años en favor del deporte nacional, y en especial del militar. Enhorabuena.