SANTO DOMINGO.-El capitán Luis Pavel Luna Kunhardt, nunca pensó que el salto libre realizado el pasado viernes como parte de la celebración aniversaria del Comando de Fuerzas Especiales de la Fuerza Aérea se convertiría en la última maniobra de este tipo que realizaría.
Luna Kunhardt, quien pertenecía a la Policía Nacional tenía experiencia en estas acciones, pero al parecer al momento de su descenso no hubo suficiente brisa para hacer el debido aterrizaje, lo que lo llevó a estrellarse fuertemente con el pavimento de forma tal que recibió golpes contusos en prácticamente todo su cuerpo los cuales le produjeron la muerte.
“¡Cuidado murió la brisa!”, dijeron desesperados algunos compañeros que se encontraban en tierra cuando segundos después vieron al oficial golpeado contra el pavimento.
Tras este accidente se vivieron momentos de tensión en la base aérea de San Isidro, donde otros paracaidistas hacían descensos.
“¡Un médico!, ¡Una ambulancia!”, eran parte de las exclamaciones de los presentes por tratar de ayudar a su compañero quien aún con vida no podía ni moverse por el impacto.
Sus exclamaciones por segundos parecían no tener respuesta. “¡Un vehículo por favor, rápido por favor!”, gritaba desesperada una doctora que junto a otros cuatro compañeros daban asistencia a Kunhardt.
La ambulancia nunca apareció, pese a ser una actividad de alto riesgo donde se debe prever equipos de respuesta rápida ante cualquier accidente.
Después de unos segundos el cuerpo del oficial fue trasladado en la parte trasera de una camioneta al hospital Ramón de Lara que se encuentra en ese complejo donde recibió las atenciones de lugar, pero desafortunadamente no vivió para contarlo.
Los familiares del uniformado le dieron el último adiós este domingo luego de que falleciera la mañana del sábado en el referido centro de salud.
Kunhardt era hijo de un general retirado de la Policía, según informó un agente cercano a la familia. La Fuerza Aérea conformó una comisión para investigar el accidente.