Un proceso electoral, fluido, pero atípico

Un proceso electoral, fluido, pero atípico

Un proceso electoral, fluido, pero atípico

Patricia Arache.

El recién concluido proceso electoral, en el que fue reelecto con mayoría absoluta para el período 2024-2028 el presidente de la República, Luis Rodolfo Abinader Corona, ha generado una estela de casos y cosas, pocas veces vistas o, quizás, nunca vistas, en una jornada comicial. Ha sido único, atípico.

Ha generado nuevos retos y oportunidades, así como una notable transformación del cuadro político partidario, cuyos líderes tendrán que analizar su desempeño y hasta su propio futuro, marcado por evidencias de que se encaminan hacia la desaparición definitiva.

Desde candidatos a diputados que habrían obtenido, entre uno y cinco votos (lo cual significa que, probablemente, miembros cercanos de sus propias familias no marcaron su rostro en la papeleta electoral) hasta la confirmación de la casi desaparición de una organización emblemática que, como el Partido Revolucionario Dominicano (PRD), de 97 mil 655 votos en el 2020 pasó a la triste realidad de sólo 19 mil 790 sufragios en este 2024, equivalente al 0.45%.

Los citados son solo detalles, frente al desplome descomunal del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), por ejemplo, que, en su momento, controlaba todas las patas del poder en forma absoluta y que, todavía, hace apenas cuatro años, en el 2020, alcanzó el 37.46%, para quedar en un segundo lugar frente al hoy gobernante PRM, que registró el 52.52% y Leonel Fernández, con su entonces nueva estructura, Fuerza del Pueblo, que alcanzó el 8.90%.

En esta oportunidad, el otrora todopoderoso Partido de la Liberación Dominicana (PLD), queda en un lejano tercer lugar al obtener apenas un 10.39% con sus 453 mil 468 votos, que solo le alcanzaron para contar con 14 diputados y ni medio senador.

Muchos creen que el 10.39% del candidato presidencial, actual alcalde de Santiago y ex diputado de la República, Abel Martínez Durán, respondió más a su carisma y al reconocimiento de su muchas veces elogiada administración municipal, que a la preferencia misma por el cinco veces gobernante Partido de la Liberación Dominicana (PLD).

Respecto a la presencia femenina también hay datos interesantes: De treinta y dos senadores que conforman la Cámara Alta del Congreso de la República Dominicana, actualmente hay cuatro mujeres: Faride Raful, del Distrito Nacional, Ginette Bournigal, de Puerto Plata, Lía Díaz Santana, de Azua, y Melania Salvador Jiménez, de Bahoruco.

Esos cuatro escaños constituyen el 12.5% de la totalidad de la matrícula de representantes provinciales y del Distrito Nacional, que ahora se reduce a 6.25%, con la ratificación de las senadoras del Partido Revolucionario Moderno (PRM), Ginette Bournigal y Lía Díaz Santana, dos de las 14 candidatas de distintos partidos que terciaron en el pasado proceso.

Hay que resaltar, empero, el aumento de la matrícula femenina en la Cámara de Diputados, que ahora pasa de 49, en el 2020 a 67 representantes, en este 2024.

Y, dónde todos han puesto el grito al cielo, es en la aplicación del método D’Hondt, consagrado en el artículo 4 de la Ley electoral número 157-13, en la escogencia de los diputados y que ahora desdeñan distintos candidatos y hasta autoridades de los propios partidos políticos que la concibieron.

El sistema D´Hondt es una fórmula matemática, mediante la cual se obtiene un promedio mayor para asignar los cargos en candidaturas múltiples como diputaciones, regidurías y vocalías.

Parece que hasta el resultado de las elecciones presidenciales y congresuales del pasado 19 de mayo, los partidos no sabían cómo funcionaba, porque las críticas en torno a su aplicación no han cesado y ya se plantea la necesidad de que esa ley, que buscaba garantizar la representación de las minorías, sea modificada en ese aspecto.

La verdad es que hubo un proceso electoral tranquilo, transparente y fluido, con baja presencia de votantes, y una clara convicción de la mayoría que acudió a las urnas de que el Estado siga siendo conducido por el presidente Luis Abinader, quien obtuvo el 54.37% de los votos, con su Partido Revolucionario Moderno (PRM) y otras 21 organizaciones políticas aliadas.