El veterano Robinson Canó dejó entrever hace unos días, que ha recibido ofertas para jugar en la próximo temporada de la Liga Mexicana del Pacífico.
Si bien Canó, y lo está demostrando en la Serie del Caribe 2024, mantiene parte de las condiciones ofensiva y defensiva, que lo hicieron estelar en Grandes Ligas, no creo que esa posibilidad sea la más acertada.
En la Liga Mexicana, eso ha sido histórico, juegan algunos peloteros que todavía creen que pueden regresar a la Gran Carpa, y una inmensa mayoría de los que ya no aportan nada.
A menos que no sea porque está en crisis económica, lo cual lo pongo en duda, por las empresas millonarias que preside o tiene acciones, ir a la Liga Mexicana del Pacífico, no es un paso conveniente.
Siempre se ha sostenido que cada cabeza es un mundo, pero Canó debe respetar su trayectoria bien ganada, y descartar de plano las posibles intenciones de seguir en una liga que no le aporta absolutamente nada en ningún aspecto.
RADARES.- Los trabajos organizativos y de reconstrucción de obras para los próximos Juegos Centroamericanos y del Caribe, proyectados a efectuarse en Santo Domingo en 2026, parece que a partir de esta semana, con la presentación del próximo jueves en la Cancillería, deben tomar un ritmo imparable, cosa de que todo esté listo con mucho tiempo de antelación a la fecha de inauguración…
Ello así, porque como dice el refrán: “Camarón que se duerme, se lo lleva la corriente”, y el trabajo que resta por realizar es bastante arduo y complejo, a pesar de que ya tenemos experiencia por las dos versiones realizadas aquí en 1974 y 1986…
Aquí el aguaje es una profesión, y la mejor muestra de ello, ha sido la crisis generada en el seno del Comité Olímpico, con seis dimisiones en el Comité Ejecutivo, donde todos regresarán como si nada pasó.