WILLIAMSPORT, Pensilvania, EE.UU.-Al representar a un cliente en un tribunal por primera vez en casi tres décadas, Rudy Giuliani demostró su falta de práctica cuando intentó demostrar que se ha despojado al presidente Donald Trump de su reelección.
El exfiscal federal y exalcalde de la ciudad de Nueva York, que está al frente de los esfuerzos de Trump para revertir el resultado de las elecciones, ingresó al tribunal en la pequeña población de Williamsport, Pensilvania, entre los gritos de aliento de unos pocos partidarios del presidente.
Durante las horas siguientes jugueteó con su cuenta de Twitter, olvidó a cuál juez se dirigía y lanzó acusaciones irracionales e infundadas sobre una conspiración nacional de los demócratas para robar la elección.
No han surgido pruebas de tal cosa desde la jornada electoral.
Giuliani se mofó de un abogado adversario, al que llamó “el hombre que está muy enojado conmigo, he olvidado su nombre”.
Confundió al juez con el de un caso en otro distrito de Pensilvania que desestimó otra denuncia de la campaña de Trump: “Me acusaron de no leer su opinión y de no comprenderla”.
Y se confundió con el significado de la palabra “opacidad”.
“En los condados de los demandantes se les negó la oportunidad de tener una observación sin obstrucciones y garantizar la opacidad”, dijo Giuliani.
“No tengo certeza total sobre el significado de opacidad. Significa que se puede ver, ¿no es cierto?” “Significa que no se puede”, dijo el juez federal Matthew Brann.
“Grandes palabras, su señoría”, dijo Giuliani.
En ocasiones la abogada de Filadelfia que colabora con Giuliani, Linda Kerns, se ocupó de responder a las preguntas de Brann.
El abogado adversario Mark Aronchik replicó a las afirmaciones reiteradas de Giuliani de que era ilegal que los condados ayudaran a la gente a votar.
“No creo que conozca el código electoral de Pensilvania”, dijo Aronchik, insinuando —sin decirlo— que Giuliani era un forastero mal preparado. La campaña de Trump quiere impedir que Pensilvania certifique su elección.
La demanda se basa en una denuncia de que Filadelfia y seis condados gobernados por los demócratas en ese estado permitieran efectuar correcciones a boletas enviadas por correo que de otro modo serían descalificadas por razones técnicas, como la falta de un sobre o una firma.
No está claro cuántas boletas se verían afectadas, aunque algunos abogados adversarios sostienen que son muy pocas para revertir el resultado. El demócrata Joe Biden superó a Trump en el estado por más de 70.000 votos.