Un cura polaco anuncia su homosexualidad

Un cura polaco anuncia su homosexualidad

Un cura polaco anuncia su homosexualidad

  Roma.- Un cura polaco, miembro de la Congregación para la Doctrina de la Fe, reveló su homosexualidad este sábado en dos periódicos, un día antes del sínodo sobre la familia, para sacudir a una Iglesia «paranoica» sobre este tema.

El padre Krysztof Olaf Charamsa, nacido en Gdynia (Polonia) hace 43 años, reconoce, además, que tiene pareja. «Sé que tendré que renunciar a mi ministerio, aunque es toda mi vida», asegura en el diario italiano Corriere della Sera.

«Sé que la Iglesia me verá como alguien que no supo cumplir con su deber (de castidad), que se extravió y, por si fuera poco, no con una mujer, ¡sino con un hombre!», exclama.

Pero «no hago esto para vivir con mi pareja, lo hago para mí, para mi comunidad, para la Iglesia. Es una decisión mucho más profunda que nace de mi reflexión sobre lo que predica la Iglesia».

Sobre el tema de la homosexualidad, «la Iglesia lleva retraso respecto a los conocimientos que alcanzó la humanidad», opina, y asegura que «no se puede esperar otros 50 años».

«Es hora de que la Iglesia abra los ojos frente a los homosexuales creyentes y entienda que la solución que propone, esto es, la abstinencia total y una vida sin amor, no es humana», declara.

«El clero es ampliamente homosexual y también, por desgracia, homófobo hasta la paranoia, porque está paralizado por la falta de aceptación hacia su propia orientación sexual», añade en la edición polaca de la revista Newsweek.

«Despierta, Iglesia, deja de perseguir a los inocentes. No quiero destruir a la Iglesia, quiero ayudarla y, sobre todo, quiero ayudar a quienes persigue. Mi salida del armario tiene que ser un llamamiento al sínodo para que la Iglesia cese sus acciones paranoicas hacia las minorías sexuales», afirma.

«Quisiera decirle al sínodo que el amor homosexual es un amor familiar, que necesita a la familia. Todos, incluidos los gays, las lesbianas y los transexuales, llevan en el corazón un deseo de amor y de familia», dice al diario italiano, en un mensaje dirigido a los 360 participantes del sínodo que se reunirá a partir del domingo en el Vaticano.

El cura polaco confiesa que siempre se sintió homosexual pero que, al principio, no lo aceptaba y repetía lo que la Iglesia le imponía, «el principio según el cual ‘la homosexualidad no existe'».

Tras conocer a su pareja, tuvo «el sentimiento de convertirse en un mejor cura, de pronunciar mejores sermones, de ayudar mejor a los demás y de ser cada vez más feliz», cuenta a Newsweek.