Desde el momento que Uber anunció su entrada al mercado dominicano muchos taxistas comenzaron a quejarse y protestar, logrando que una buena parte de la población dominicana los defendiera, porque se trataba de hombres que están al frente de un núcleo social como es la familia y que necesitaban estos ingresos para mantenerlas.
Para analizar los efectos de Uber pudiéramos verlos desde el punto de vista de cuatro agentes diferentes, estos serían los taxistas tradicionales, los de Uber, los clientes de este mercado y el gobierno.
Actualmente en la República Dominicana no se tiene una gran cantidad de datos para saber lo que ha sucedido exactamente con ellos.
Pero un fenómeno que sí llama la atención es la integración de los taxistas tradicionales al sistema de Uber, al mismo tiempo que se mantienen en los servicios de taxis clásicos; esto quiere decir que han logrado diversificar sus fuentes de ingresos y jugar con los mecanismos para poder maximizar sus beneficios.
El segundo grupo de agentes, los choferes de Uber, han logrado sacar beneficio de este mercado, que antes tal vez no parecía rentable o asequible.
Pero lo más relevante de este transporte son las personas que están haciendo de taxistas en esta plataforma; al salir a la calle encontramos que la mayoría de los choferes de Uber son jóvenes o adultos jóvenes, entre 18 a 30 años, que no encontraban una fuente de ingreso, que ahora, al dedicarse completamente a este servicio, han logrado un nivel de ingreso bruto de hasta RD$14,000 a la semana.
En tercer lugar están los clientes de los taxistas. Según las informaciones recopiladas, en general, y a la vista de todos, los servicios de taxis tradicionales han aumentado su calidad en el transporte y el trato humano, quiere decir que los usuarios gozan de un mayor nivel de bienestar y conformidad, además de que tienen una mayor gama de precios, con unas tarifas calculadas desde RD$75.00, logran una disminución de sus gastos y pueden obtener otros bienes y servicios.
Para concluir, quiero hacer un llamado de atención hacia estos factores y de la manera en que la mayoría de los implicados se benefician con este desarrollo del libre mercado, para dar a entender que esto ha sido un ejercicio del buen capitalismo que debería de copiarse en varios sectores del país, liberando áreas que han sido monopolizadas, para que de esa manera se beneficie el pueblo en general, y no solo unos cuantos.