Bajo circunstancias normales en el béisbol, el noveno puesto en la alineación usualmente está reservado para un bateador «débil», pero en un equipo blindado como el de Estados Unidos pues es la excepción.
Trea Turner, quien viene de firmar durante el invierno un contrato de $300 millones por 11 años con los Filis de Filadelfia, en los últimos tres encuentros de «Team USA» ha sido colocado en el último puesto por el manager Mark DeRosa y lo ha hecho lucir como un genio.
El domingo el torpedero disparó dos jonrones e impulsó cuatro carreras en la victoria sobre Cuba por 14-2 para ayudar a EE.UU. a avanzar al partido de campeonato por segundo año consecutivo luego que 24 horas antes se vistió de héroe con un grand slam para derrotar por 9-7 a Venezuela.
«Trea Turner está en la zona», dijo DeRosa durante la conferencia de prensa después del encuentro. «Cada vez que la sacó del parque pensé: ‘Quién es el idiota que lo está bateando noveno’. Así es que esta alineación está construida. Lo voy a dejar quieto en estos momentos».
La ofensiva del equipo de las «Barras y Estrellas» poco a poco ha encontrado su ritmo guiados por Turner, quien promedia .368 (de 19-7) con cuatro bambinazos y 10 carreras impulsadas en el torneo.
«Solo quiero encadenar buenos turnos. No importa cuando me toque batear, es solo mantener la cosa caminando porque tengo buenos bateadores detrás de mí como Mookie (Betts), Mike (Trout) y Paul (Goldschmidt). Así que trato de no hacer demasiado y seguir divirtiéndome», dijo Turner.
El abridor Adam Wainwright, quien se apuntó el triunfo ante Cuba, no pudo dejar pasar la oportunidad para entonces hacer un comentario jocoso sobre su compañero: «Les diré, qué equipo tan divertido cuando Trea Turner batea noveno».
En los últimos dos encuentros ante Venezuela y Cuba, Turner lleva de manera combinada tres jonrones y ocho impulsadas logrando establecer varios hitos en el proceso. Con sus dos cuadrangulares ante Cuba igualó a Ken Griffey Jr. (2006) como los únicos jugadores de la escuadra norteamericana con dos tablazos en un juego de Clásico Mundial.
Al conocer el dato, Turner inmediatamente pensó en Griffey Jr., el coach de bateo del equipo.
«No puede esperar para decírselo», indicó arrancando así carcajadas en la conferencia de prensa. «No sé si él lo sabe, pero tendremos esa conversación mañana en las jaulas. Será divertido para mí».
Cuando se enteró que sus partidos consecutivos con cuatro carreras impulsadas también son un récord en este evento, se rió de forma incrédula.
«No sé nada de estas cosas. Estoy tratando de ganar con estos muchachos. Aquí no pensamos mucho en lo que hicieron el uno o el otro. Sólo queremos ganar», explicó. «Esas cosas son chéveres para mi familia que están orgullosos de mí, eso es para ellos. Me gusta jugar béisbol, competir y salir victorioso. Estamos jugando buen béisbol en este momento, así que, como dije, queda uno más para jugar y espero que esas estadísticas sigan llegando y eso será muy bueno para Team USA».
DeRosa, por su parte, se mostró complacido de cómo su equipo se ha desempeñado a su llegada a Miami con las victorias sobre Venezuela y Cuba, pero destacó la explosión ofensiva de Turner.
«Muchas cosas están pasando con esta ofensiva especialmente con Trea», indicó el manager. «Ese «swing» de anoche (sábado) será recordado por siempre, especialmente en la historia del Clásico Mundial de Béisbol».