WASHINGTON.- El presidente Donald Trump lanzó un ataque frontal ayer a la Corte Penal Internacional al autorizar sanciones económicas y de restricciones de viajes a empleados del tribunal que participan directamente de la investigación a soldados y agentes de inteligencia estadounidenses implicados en posibles crímenes de guerra en Afganistán sin consentimiento de Estados Unidos.
Un alto funcionario del gobierno dijo que Rusia podría alentar dichas acusaciones.