Washington.- El presidente Donald Trump cambió el sábado su versión sobre por qué despidió a Michael Flynn como su asesor de seguridad nacional, y ahora indicó que él sabía en ese momento que Flynn le había mentido al FBI y al vicepresidente Mike Pence sobre sus contactos con los rusos durante la transición presidencial.
Eso representó un giro con respecto a sus explicaciones iniciales de que Flynn tenía que irse porque no había sido sincero con Pence sobre esos contactos. Mentirle al FBI es un delito, algo que Flynn reconoció el viernes al declararse culpable y aceptar cooperar con la investigación del fiscal especial sobre la intromisión de Rusia en las elecciones del año pasado.
Trump tuiteó: «Tuve que despedir al general Flynn porque le mintió al vicepresidente y al FBI. Se ha declarado culpable de esas mentiras. Es una pena, porque sus acciones durante la transición fueron legales. íNo había nada que esconder!»
Fueron las primeras palabras del presidente sobre la noticia de que Flynn se declaró culpable y cooperará con la investigación guiada por el fiscal especial Robert Mueller. No está claro por qué Trump citó las mentiras al FBI como una razón para despedir a Flynn.
Eso indicaría que el presidente sabía en ese momento que Flynn había hecho algo ilegal, y por lo tanto la investigación no podía ser tan frívola como él la ha caracterizado.
Tampoco está claro cómo habría sabido eso, si se supone que la información sobre los contactos rusos no le había llegado, como él ha estado dejando implícito en su propia defensa.
Trump habló con reporteros antes de salir de la Casa Blanca rumbo a Nueva York para eventos de recaudación de fondos. Afirmó que «de ninguna manera» hubo colusión con Rusia.
Flynn dejó la Casa Blanca en febrero, y en ese entonces sólo reconoció que había dado un relato incompleto a Pence sobre sus conversaciones con el embajador ruso Serguei Kislyak.
Después de que Trump echó a Flynn, le pidió al director del FBI James Comey que pusiera fin a la investigación de esa agencia en torno a este asunto.
Comey se negó y Trump también lo despidió. El mandatario ha desdeñado públicamente tanto a Comey como a la investigación de Mueller.
Hasta ahora ha sido generoso al valorar a Flynn, excepto al decir que su consejero no podía permanecer en el trabajo después de haber engañado al vicepresidente.