Tristeza embarga a los parientes de náufragos

Tristeza embarga a los parientes de náufragos

Tristeza  embarga a los parientes de náufragos

Seis personas hospitalizada en Nafragio Guayacanes. Foto: Elieser Tapia.

Santo Domingo.-Buscando una mejor vida para él, su esposa e hijos, Ramón Antonio Mercedes Bastardo, de 48 años de edad, lo que ahora ha dejado es tristeza entre sus parientes, ya que no saben de su paradero.

Mercedes Bastardo es parte de las más de 15 personas que están desaparecidas luego de que la embarcación en que viajaban ilegalmente hasta Puerto Rico zozobrara el pasado jueves tras salir de la playa de Guayacanes, San Pedro de Macorís.

Mayra Acosta, su esposa, junto a sus seis hijos con edades que oscilan entre uno y catorce años, mantiene la esperanza de encontrarlo con vida.

Aunque a veces no le alcanzaba para el mes, lo poco que Mercedes Bastardo se ganaba “motoconchando” era parte fundamental para el sustento de esta familia petromacorisana que ahora se encuentra sumida en la impotencia.

En la misma condición de tristeza está Nereida Rodríguez, quien afirma que se enteró que su hija Rosalba Polanco Rodríguez y su sobrina Leidy Rodríguez también se encontraban en la referida embarcación.

“Yo no he sabido nada de ellas. Estamos haciendo diligencias llamando a algunas personas para ver si nos dicen algo”, manifestó Rodríguez a EL DÍA. Ambas jóvenes, de 29 y 22 años, son oriundas de Nagua.

De su lado, los padres de Juan Carlos Ramírez Santana, de 41 años, quien residía en San Pedro de Macorís, están sumidos en la incertidumbre, ya que afirman habían aconsejado a su vástago para que no se embarcara.
Solo 8 personas de las más de veinte que viajaban han sido encontradas.

Armada seguirá búsqueda

Sin lograr rescatar a ninguno de los más de diez náufragos que están desaparecidos, la Armada de República Dominicana informó ayer que continúa su búsqueda a 25 millas náuticas de la playa de Guayacanes, lugar de donde salieron con destino a Puerto Rico en un viaje ilegal.

Además de la Armada en las labores de rescate participan miembros de la Fuerza Aérea, del Servicio de la Guardia Costera de los Estados Unidos y de la Defensa Civil.



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