Altagracia Suriel
Federico Hegel es otro de los grandes hombres que han impactado en el pensamiento filosófico y político. No obstante la complejidad de sus ideas, aproximarse a Hegel nos permite entender su influencia en el marxismo y en otras corrientes.
También en Hegel encontramos ideas controversiales como el eurocentrismo y su exaltación del espíritu germánico. Al margen de lo anterior, de él aprendemos la importancia de la historia, el enfoque de la dialéctica y su concepción del Estado como la máxima evolución de las organizaciones sociales.
1. La importancia de la historia:
Para Hegel, el análisis histórico es la aproximación más idónea de adquisición de conocimiento. Plantea que la historia universal es el curso evolutivo y la realización del espíritu humano.
La historia revela la realidad del pasado y permite conocer tendencias del presente y del futuro. Una concepción interesante de Hegel es la visión de la historia como tribunal de justicia del mundo. A esta idea se puede asociar la perspectiva de que la historia juzga a los hombres y los absuelve o condena. La muy usada frase: “La historia lo juzgará!, rememora esa visión de Hegel de la historia como revelación y providencia.
Pero para Hegel, aunque la astucia de la razón humana protagonice las grandes hazañas históricas, la misma historia a veces se burla de los hombres generando resultados impredecibles. Pareciera que endiosar la razón es un desafío al azar o al misterio.
2. La dialéctica:
Desde la concepción dialéctica de Hegel, la realidad, la historia, las ideas y las cosas son contradictorias y dicha contradicción se expresan en la tesis, la antítesis y la síntesis.
Las grandes conquistas sociales expresan una visión dialéctica. Empiezan con ideales de libertad y emancipación, se convierten a veces en luchas violencias pero al final se armonizan las ideas y las irracionalidades convirtiéndose en consensos, nuevos caminos o sistemas.
3. El Estado como espíritu objetivo:
Para Hegel, el Estado es la expresión máxima de socialización humana. Es el último peldaño de la relación entre los seres humanos y la sociedad. En el Estado el individuo expresa su moralidad.
Para Hegel el Estado es el espacio por excelencia de desarrollo de las personas en tanto que en él confluyen los intereses comunes. Según Hegel, sólo en el Estado el individuo se eleva a una dimensión histórica de significación plenamente humana.
