Podemos definirlos como dificultad para el hombre conseguir su orgasmo en tiempo adecuado o retraso persistente y/o recurrente del orgasmo tras una fase de estimulación sexual normal.
En los hombres generalmente al tener el orgasmo se produce la eyaculación. Durante el orgasmo normal del hombre, se presenta contracción de los músculos del periné, la próstata y las vesículas seminales que impulsan el semen hacia la uretra (conducto del pene por el que también sale la orina), el cuello de la vejiga se cierra y el semen es expulsado hacia el exterior.
Esto es una eyaculación normal que generalmente se produce junto al orgasmo.
Algunos varones podrían eyacular y se quejan de disminución o ausencia de la sensación de placer que deben sentir durante el orgasmo. Esto se denomina Anhedonia orgásmica y puede ser generada por causas orgánicas o psíquicas, entre ellas un sentimiento de culpa extrema por experimentar placer sexual.
Estos sentimientos producen una respuesta que aísla de la conciencia el componente afectivo de la experiencia orgásmica y no sienten ese placer. Otro trastorno orgásmico masculino es la Eyaculación Retrógrada, en la cual el líquido seminal o semen que debe ser eyaculado a través de la uretra, en lugar de salir, se va hacia la vejiga, luego sale junto a la orina la próxima vez que el hombre vacíe su vejiga.
Este trastorno es producido por previas cirugías prostáticas o en área pélvica o abdominal, diabetes de larga duración, enfermedades del sistema nervioso y algunos medicamentos.