Vehículos fluían a cuenta gotas por inundaciones en las vías.
SANTO DOMINGO.- Largas hileras de vehículos y gente varada en múltiples lugares matizaron ayer el Gran Santo Domingo, tanto en horas de la mañana como en la tarde, fruto de las intensas lluvias provocadas por la vaguada que afecta el territorio.
Como era de esperar, las calles y avenidas estaban prácticamente intransitables, especialmente en el casco urbano de la ciudad, donde se generaron embotellamientos inusuales debido al cierre, a primeras del día, del desnivel de la Núñez y 27 de Febrero para la colocación de filtrantes contra las inundaciones causadas por los aguaceros.
Ante la ansiedad de llegar a sus destinos, conductores se desviaban por las escasas vías alternas que encontraban a su paso, al tiempo que algunos en zonas críticas, como el Malecón, la avenida Luperón, así como la Anacaona con Cibao Oeste se atascaron y confrontaron mayor dificultad por las fuertes escorrentías “En la Núñez de Cáceres con 27 de Febrero se ha estado inundando, cuando nuestros técnicos evalúan la obra, no se detectaron los filtrantes.
El ministro Deligne Ascensión instruyó una licitación para resolver varios puntos críticos de la capital al nivel de drenaje y estamos ejecutando ese contrato comenzando precisamente con ese punto que, por el momento, es el más crítico por los días de lluvia que tenemos”, detalló Roberto Herrera, viceministro de Supervisión y Planificación del Ministerio de Obras Públicas vía telefónica a un programa radial.
Precisó que vienen trabajando esos puntos en la construcción de dos filtrantes de 24 pulgadas de diámetro y 103 pies de profundidad, desde las 10:00 p. m. a 6:00 a. m., pero tuvieron que extenderse hasta las 09:00 a. m. y continuarán.
