De pasarla bien a vivir una pesadilla, así relata la noche en el Jet Set, pareja de esposos que sobrevivió a la tragedia
San Cristóbal.- Los rasguños en su brazo, la frente y una pierna son sólo una muestra de aquella fatídica madrugada cuando colapsó el techo del Jet Set, sin embargo, las huellas de su corazón son imborrables, relató la mañana de hoy, Marisol Chalas, quien sobrevivió junto a su esposo, de milagro.
Esa noche fueron a ver a Rubby Pérez, quien se había criado en el mismo sector que su pareja Víctor de la Cruz, por lo que quisieron ir con otros amigos a darle apoyo al artista, sin imaginar que en unos segundos todo se volvería gris y perderían a tantos amigos.

“Buenísimo estaba el ambiente, yo particularmente la estaba pasando muy bien, nunca me imaginé que iba a vivir esa pesadilla que yo viví esa noche”, relató la mujer de 58 años, oriunda de San Francisco de Macorís y que por un largo rato estuvo atrapada entre los escombros.
Comentó que su esposo Víctor es de Haina y hacía apenas tres semanas que su compañero de vida tomó la decisión de formar parte de los Haineros Dorados. Este añadió que el club era un espacio en el que compartiría con amigos de la infancia, en fin, contemporáneos y vecinos.
Según expresó Chalas, además de ver a Rubby celebraban el cumpleaños de una compañera del club, pero “no tuvimos tiempo de cantarle feliz cumpleaños… ella murió en el lugar”, se lamentó.
Explicó que su mesa junto a unos 24 compañeros estaba ubicada a la derecha de la entrada y antes de que cayera el techo sintió que le cayó agua, pensó se trataba del aire acondicionado y se quedó tranquila, pero en otra parte vio que estaba cayendo más agua y ahí mismo se derrumbó el techo.
“Ese techo nos aplastó a todo el mundo”, dice sobreviviente
“Ese techo nos aplastó a todo el mundo. A mí me dejó de la cintura para arriba y a mi esposo lo enterró”, manifestó al agradecer a quienes los sacaron de allí, aunque antes de sacarla otra persona quiso ayudarla, pero el peso del concreto no se lo permitió.
Reveló que lo primero que hizo fue pedirle a Dios que los ayude a salir de ahí porque estaba viva, mientras aseguró que la desesperación se apoderaba de ella, no sólo porque no podía moverse sino porque había muchas personas enterradas y varios jóvenes pidiendo auxilio.
“Había muchas jóvenes alrededor mío gritando. Yo le decía, tengan fe que Dios nos va a sacar de aquí”, continuó narrando Chalas, quien todavía camina con suma dificultad.
Sostuvo que los gritos eran de quienes quedaron arriba, pues considera que los que quedaron atrapados murieron instantemente.
Sintió miedo por su madre
Su madre tiene 90 años y en cinco años ha perdido a dos hijos, por lo que Chalas no quería ser la tercera. “No quería que mi madre sufriera ese dolor tan grande”, precisó.
Tanto Víctor como Marisol se sienten tristes con la situación que ha afectado a todo el país y por la que han tenido que despedir a más de 10 miembros del club y de su entorno.
Les invitamos a leer: Testimonios de sobrevivientes: «Me recosté del dorso de un cadáver para sobrevivir y tomar aire»
Etiquetas
Yamer Javier
Periodista especializada en la fuente de salud. Máster en Comunicación Estratégica y Relaciones Públicas,
Artículos Relacionados