Washington.-Toyota fabricó más de 1,38 millones de autos y camionetas en Estados Unidos el año pasado, sólo detrás de GM, Ford Motor Co. y Fiat Chrysler Automobiles NV.
Sin embargo, la producción de Toyota tuvo un déficit de ventas de alrededor de 1 millón de vehículos en el país. Entre los modelos importados figuran los híbridos Prius fabricados en Japón, los utilitarios deportivos RAV4 y Lexus RX ensamblados en Canadá, y algunas pickups medianas Tacoma hechas en México.
La pregunta de los US$10,000 millones para Toyota –esta cifra es la que prometió invertir en Estados Unidos en los próximos cinco años– es si todas las raíces que ha echado en Estados Unidos bastarán para calmar a Trump.
Las acciones de la empresa cayeron 4 por ciento desde que Trump arremetió contra sus planes en México, después de registrar una declinación de 8 por ciento el año pasado.
“¡Quiero que se construyan nuevas plantas aquí para vender autos aquí!”, tuiteó el presidente el martes, antes de una reunión con los máximos ejecutivos de GM, Ford y Fiat Chrysler.
Toyota busca afanosamente algo más para ofrecerle a Trump que la expansión de sus fábricas y el plan de modernización que presentó el 9 de enero, según dos personas familiarizadas con las conversaciones.