
San Juan, Puerto Rico.-“Tomé no una, sino nueve yolas en 2004 para llegar a esta isla, me vi casi al ahogarme, pero el sueño de llegar a Puerto Rico era más fuerte, porque estaba decidida a buscar una mejoría para mis tres hijos y mis padres”, así narra Luz del Alba por las vicisitudes que tuvo que pasar al arriesgarlo todo por la familia.
Luz del Alba es una mujer quien, pese a ser devuelta en una ocasión de la “Isla del Encanto”, volvió con más fuerzas, desafiando en ocasiones la bravura del mar y hasta el quedarse en pleno Canal de la Mona en una frágil embarcación sin combustible.
“Cuando me montaba en la yola cerraba los ojos, le pedía al Señor que me llevara con vida”.
Dice que en muchas ocasiones se le acabó la gasolina y tuvieron que devolverse, durar hasta más de tres días sin que sus familiares supieran de ellos.
El mal tiempo los devolvía
