Todos los finales de año son propicios para pasar balance. Evaluar esas metas que elegimos al principio del mismo año, sintiendo felicidad por lo alcanzado y tener un tiempo de introspección para evaluar lo que no, decidir si vale la pena volver a ponerlo en nuestro próximo “check list” para el 2023 o simplemente que no es tan necesario para nuestra felicidad inmediata y futura.
Siempre he escrito de cerrar círculos y superar etapas. De tener consciencia de las cosas que queremos, de lo que hacemos y de las personas que dejamos estar a nuestro lado. Lo saludable es siempre tener claro el papel que juegan en nuestras vidas y su importancia.
En estos momentos, cuando nos acercamos al final de un año, se presta para vaciar la maleta y dejar en ella lo que realmente es útil y de valor para nosotros.
Con eso podremos afrontar con alegría lo que nos espera en el nuevo año.
Sentir tristeza, por lo que no hemos logrado o las personas que se van, nos pasa a todos. Pero que esto no detenga tu crecimiento, no limite tu avance y no te permita ver las bendiciones que están a la vuelta de la esquina. La vida está en constante evolución y cambios, abre los brazos para recibirlos.
Ahora bien, lo importante de cerrar ciclos es que incide de manera directa en lo que haremos en un futuro. Si el ciclo, sea cual sea, permanece abierto, interfiere con nuestro avance personal. Es como dejar una llave que gotea sin repararla y esperar a que esto no tenga un costo.
Leí por ahí que los seres humanos nos aferrarnos a lo conocido, por más negativo que sea. La costumbre es una fuerza muy poderosa que nos impulsa a mantenernos en la inercia.
Se percibe como si fuera más fácil soportar lo malo conocido que emprender la aventura de lo bueno por conocer. Hoy, con estas palabras, te invito a ver más allá de tus narices, comprometerte contigo y dar ese paso de cambio que puede llevarte a entornos más hermosos y enriquecedores. No le tengas miedo a lo desconocido.
Camina con cautela, pero camina. Saborea lo diferente, porque probando es que se sabe… date la oportunidad de moverte tantas veces como sea necesario.
Cierra con conciencia el 2022 y elige las herramientas que necesitas para construir el 2023 que quieres. Elige, no le dejes a otro ese trabajo.