El béisbol profesional dominicano arranca mañana con grandes expectativas, que para hacerse realidad los ejecutivos de los seis conjuntos participantes tendrán que realizar esfuerzos inusitados.
El país está más en política que en béisbol, y aunque son las dos actividades preferidas, no hay dudas deque la primera le estará “comiendo los caramelos”, teniendo en cuenta que el país está inmerso en elecciones de todos los calibres.
El campeonato comenzará ante una crisis política de grandes proporciones, que de seguro tendrá repercusiones en lo económico, tal y como ya se está reflejando por el alza continúa del dólar y otras monedas con relación al peso.
Es un torneo expuesto a sufrir contratiempos de diversos tipos, pero con énfasis en las diversas variables económicas, derivadas del rudo y deshumanizado quehacer político criollo, el cual impregna todo el universo de la sociedad.
Que los ejecutivos de la pelota no se duerman en sus laureles, creyendo que los tiempos son los mismos de hace unos 10 años, la situación ha cambiado casi en 180 grados.
Pero es nuestro deseo que realicen los ajustes y cambios que se requieran para que todo resulte un éxito total.
RADARES.- Lamentable el grave accidente automovilístico que sufrió ayer Errol Spence, campeón mundial welter, por guiar a exceso de velocidad su vehículo de alta potencia.
Es probable que sobreviva, pero imposible que pueda volver a los cuadriláteros…Dave Roberts, dirigente de los Dodgers, debe estar ya en la lista negra para convertirse en el próximo despedido.
El torpe manejo de sus jugadores ante Tampa dejó mucho que desear. El último en pagar los platos rotos. fue el mánager Gabe Kapler de los Filis.