SEUL, Corea del Sur.— Háganse a un lado Apple y Samsung. La próxima gran novedad en los teléfonos de usos múltiples puede venir de firmas chinas poco conocidas como Huawei, Xiaomi, TCL y OPPO.
Las fabricantes de teléfonos móviles nacionales ya superaron en ventas a Samsung en China y ahora le apuntan a Apple.
Analistas estiman que en los próximos años estos aparatos Android baratos van a captar muchos clientes en Europa e incluso en los países donde nacieron Samsung y Apple, Corea del Sur y Estados Unidos.
Los fabricantes de teléfonos chinos dejaron en claro cuáles son sus ambiciones esta semana en el Congreso Mundial Móvil de Barcelona. Huwaei y TLC intentaron hacerle sombra a Samsung y LG, que presentaron nuevos aparatos costosos.
Xiaomi, que generalmente lanzas sus teléfonos en China, presentaba su nuevo Mi5 en Barcelona el miércoles.
“Los vendedores de teléfonos chinos tienen algo único que ofrecer: su precio”, expresó Shu On Kwok, editor de AndroidPIT, un portal que sigue de cerca las novedades con los aparatos Android. Te ofrecen el mismo hardware que un LG o un Samsung, pero a un precio más bajo”.
La participación de Samsung en el mercado bajó en el 2015 y Apple pronostica que sus ingresos disminuirán por primera vez en 13 años. Los dos tendrán que demostrar en el futuro que realmente se justifica pagar más por sus aparatos.
Apple dice que sus teléfonos son únicos ya que cuentan con hardware, software, servicios y aplicaciones diseñados específicamente para ellos… aunque a menudo los aparatos Android ofrecen cosas similares.
El presidente de Samsung D.J. Koh dijo el domingo que la empresa “tiene otras ideas” que van más allá de las funciones típicas de los teléfonos.
Indicó, por ejemplo, que Samsung promueve la compatibilidad de sus aparatos Galaxy con un auricular de realidad virtual de la compañía y con una cámara de 360 grados en la que están trabajando.
Pero la tecnología de “RV” está dando recién sus primeros pasos y le interesa más que nada a los aficionados a los juegos y a los pioneros tecnológicos. Las empresas chinas están acortando las distancias con Samsung.
Si bien Samsung sigue siendo la compañía que más teléfonos fabrica en el mundo, ya no figura entre las cinco primeras en China, según las firmas de investigaciones del mercado IDC y Counterpoint Technology.
Las ganancias generadas por los aparatos móviles ya no son las de antes. Las ventas de Apple aumentaron en China en el cuarto trimestre del año pasado, pero fueron inferiores a las de Huawei.
Muchas empresas chinas venden teléfonos decentes por menos de 200 dólares, comparado con los 650 que cuestan un iPhone o el Galaxy de Samsung.
Los fabricantes chinos pueden mantener los precios bajos reduciendo los márgenes de ganancias y usando componentes baratos, de hace uno o dos años.
Los aparatos caros de Apple y Samsung, por otro lado, tal vez sean mejores, pero ya no son tan innovadores y sus novedades no generan tanto interés.
Una foto tomada con un Huawei con buena luz se ve tan bien como la de un iPhone o un Samsung en una pantalla chica de teléfono. Melissa Chau, investigadora senior de IDC, dice que los chinos se ponen al día con las últimas novedades más rápidamente de lo que lo hacía Samsung. “Samsung no innovaba, pero copiaba con mucha velocidad”, expresó.
“Estos chinos lo hacen más rápido todavía”.
Ahora que se afianzaron en el mercado chino, estos fabricantes quieren encontrar nuevos mercados para expandirse. Analistas dicen que Huawei y Xiaomi probablemente le saquen clientes a Apple y Samsung en sus bastiones a medida que la gente decida gastar menos al adquirir aparatos nuevos.
A mucha gente ya no le interesa tener la última tecnología, de acuerdo con Oh Bong Yeon, un sudcoreano de 38 años que está dispuesta a esperar que los precios bajen o a comprar productos más baratos.
Oh tiene un iPhone 6, pero dice que adquirirá un Huawei si se vende en Corea del Sur. Raphael Rashid, un británico de 28 años que vive en Seúl, dice que le encanta el Redmi Note 2 de Xiaomi, que un amigo suyo le compró en China por 120 dólares.
Antes usaba un Huawei de 150 dólares. “Por 1.000 dólares puedo comprar cinco teléfonos nuevos en dos años”, comentó. “Siempre tendré el último aparato”.
Buena parte del crecimiento de las empresas chinas se debe a que mucha gente está comprando aparatos directamente del fabricante a través de la internet.
Huawei es hoy el tercer fabricante de teléfonos más grande del mundo, con una participación del mercado del 7% el año pasado, comparado con el 6% del año previo. La participación de Samsung (23%) y Apple (16%) es muy superior, pero ese es un dato relativo.
El presidente de la empresa ZTE Adam Zeng, por ejemplo, dice que le interesa estar entre los tres primeros en determinados mercados, no necesariamente a nivel mundial. Xiaomi, por su parte, puede tener problemas para conquistar mercados afianzados, sobre todo el de Estados Unidos, porque ha sido acusada de copiar los aparatos de Apple y de otras empresas.
Chau, la investigadora de IDC, dice que las firmas chinas pueden seguir acortando la brecha en parte porque Samsung y Apple ya no tienen una imagen tan inmaculada.
Apple, que sigue siendo la principal marca en China, “ya lleva bastante tiempo aquí y la gente la conoce bien. Perdió el aura que le daba el hecho de ser algo novedoso”.