Existen varias tendencias tecnológicas que nos parecen muy prometedoras. El mundo camina y se desarrolla al ritmo de las innovaciones que se producen en nuestros países.
Los avances tecnológicos definen nuestras sociedades.
Entre dichas tendencias se encuentran varias, como el Internet de las Cosas, Ciberseguridad, Ciencia de los Datos y muchas más.
Una de las que nos parece más importantes, pero que sin embargo no se menciona tanto, es la relacionada con la tecnología aplicada al sector financiero. Se conoce con el nombre de Fintech o tecnología financiera.
Hace unos meses, un amigo del ámbito bancario me dijo que el negocio de los bancos era altamente tecnológico. Eso me dejó pensando, y a la vez reconociendo, la gran verdad detrás de esas palabras.
Si reflexionamos un momento, nos daremos cuenta que la inmensa mayoría de nosotros realiza transacciones electrónicas de manera constante.
Todo lo que hacemos en nuestro banco, o casi todo, sucede mediante un dispositivo electrónico o plataforma digital. Sin tecnología, no existirían los bancos tal cual los conocemos hoy en día.
El Fintech o Tecnología Financiera es una “nueva industria financiera que aplica la tecnología para mejorar las actividades financieras”.
En otras palabras, Fintech son “las nuevas aplicaciones, procesos, productos o modelos de negocios en la industria de los servicios financieros, compuestos de uno o más servicios financieros complementarios y puestos a disposición del público vía Internet”.
Sabiendo esto, pensamos que una de las grandes tendencias es, y seguirá siendo por mucho tiempo, el uso intensivo de las tecnologías como plataformas necesarias y obligatorias en el crecimiento del sector financiero nacional.
El Internet Banking, y demás formas de proveer servicios a los clientes, continuará dominando en el modelo de negocios de las instituciones financieras de hoy y del mañana. Aprovechemos con entusiasmo las bondades de estos avances tecnológicos.