Tato Bisonó pone nombre al cambio habitacional de 3 últimas décadas

Santo Domingo.-Campechano y ligero de palabras, acomodado en su oficina de trabajo, Rafael Bisonó —Tato para todos— deja ver una cierta costumbre de tratar con periodistas, un plus tal vez heredado de su prolongada cercanía con Joaquín Balaguer, de quien fue uno de los ingenieros de obras más cercanos en sus dos administraciones.
Constructora Bisonó, sin embargo, le antecede a su trato con el líder político más eficiente de la corriente conservadora de la política dominicana, al que la izquierda ni colaboradores pudieron nunca cogerlo asando batatas, como le ocurrió a Trujillo.
