Los constantes contratiempos de mucho peso que ha encontrado en los últimos meses el estelar jugador Fernando Tatis Jr., lo han puesto a reflexionar muy en serio, de que debe dar un giro de 180 grados en su comportamiento dentro y fuera del terreno.
Y a pesar de esas metidas de pata, este muchacho ha sido bendecido, ya que la organización de los Padres de San Diego, tras esos encontronazos, le ha brindado todo el respaldo en sus momentos de desgracia.
En recientes declaraciones Tatis Jr., se lamentaba de sus errores, asegurando que su vida ha cambiado tras el dopaje y el accidente de motocicleta.
Asegura que “es un hombre nuevo” que de ahora en adelante tomará las cosas con mucho mayor responsabilidad.
Me encantó cuando lo escuché decir lo siguiente: “Definitivamente me senté y pensé un poco en lo que me pasó todo este tiempo”.
Tatis Jr., de apenas 24 años, tuvo que someterse a dos cirugías para reparar una fractura de su muñeca y a un procedimiento quirúrgico en su hombro izquierdo, de las cuáles ha salido airoso, pero para evitar lesiones a las que está muy expuesto debido a su estilo de juego, será movido a defender el jardín derecho.
Es una movida que no me agrada, teniendo en cuenta que este muchacho cubre demasiado terreno en el campo corto.
Lo más importante es que está de vuelta para seguir demostrando que puede seguir siendo una de las caras más llamativas de las Grandes Ligas.
Pero lo más importante es que tome en consideración que las oportunidades no paren como calabazas, que las coyunturas como esas aparecen siempre.