Damasco.- La cifra de muertos por el hundimiento de una barcaza libanesa con rumbo a Europa el pasado jueves frente a las costas de Tartús, en Siria, ascendió a 99, informaron este lunes fuentes oficiales sirias.
“La cifra de víctimas asciende hasta el momento a 99 personas, tras hallarse esta mañana un nuevo cadáver”, dijo el director de Puertos de Siria, el coronel Samer Qabrasly, según la agencia oficial siria de noticias, SANA.
Asimismo, explicó que el cadáver recuperado “fue entregado a la Autoridad General del Hospital Al Basel”, en la ciudad de Tartús, frente a cuyas costas tuvo lugar el hundimiento con decenas de inmigrantes de varias nacionalidades, en su mayoría palestinos, sirios y libanesas.
Por su parte, el director del citado hospital, Iskandar Ammar, afirmó que “todos los supervivientes del naufragio han sido dados de alta tras mejorar su estado de salud”, sin especificar el número de supervivientes o sus nacionalidades. Según SANA, la barcaza zarpó el pasado martes de la localidad libanesa de Trípoli con dirección a Chipre, pero se hundió el jueves.
Algunos de los supervivientes, citados el viernes por la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos, dijeron el viernes que la barcaza transportaba a más de 150 personas que tenían la intención de llegar a Italia, Chipre u otros países europeos.
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El pasado sábado, el Ejército libanés arrestó al presunto traficante responsable de organizar la ruta en barcaza a Europa.
Casi el 80 % de los libaneses viven por debajo del umbral de la pobreza, mientras que cerca del 90 % de la comunidad refugiada siria en el Líbano sufre pobreza extrema y buena parte de ellos están afectados además por la inseguridad alimentaria, de acuerdo con datos de la ONU.
Desde 2020, cuando se agravó la crisis económica desatada en el Líbano un año antes, se ha disparado la salida de embarcaciones ilegales que tratan de llegar a Chipre con el objetivo de alcanzar posteriormente otros países europeos.
Según la ONU, aquel año partieron al menos 38 barcos con más de 1.500 pasajeros, más del 75 % de los cuales fueron interceptados por las autoridades o devueltos a tierra.