PUKHRAYAN, India.— La cifra de muertos en el peor accidente de tren registrado en India en varios años subió el lunes a 145 personas, mientras los rescatistas utilizaban grúas para levantar los restos de metal retorcido y buscar más cuerpos bajo los vagones.
El tren de pasajeros estaba en torno a la mitad de su viaje de 27 horas entre las ciudades de Indore y Patna cuando se salió de las vías a las 3:10 de la madrugada del domingo, despertando de golpe a los viajeros.
El impacto fue tan fuerte que uno de los vagones cayó sobre otro, aplastando al que quedó debajo. Los pasajeros dijeron haber oído el golpe tras verse arrojados de sus camas.
“Hubo un ruido fuerte como de terremoto. Caí de la litera y un montón de equipaje me cayó encima”, dijo Ramchandra Tewari, un pasajero que sufrió una lesión en la cabeza, desde su cama de hospital en la ciudad de Kanpur. “Pensé que estaba muerto y luego me desmayé”.
Rescatistas, soldados y miembros de la agencia india de gestión de desastres trabajaron toda la noche para sacar a la gente atrapada entre los restos retorcidos y volcados de los vagones.
El suceso se produjo cerca de Pukhrayan, un pueblo a las afueras de la ciudad industrial de Kanpur, unos 400 kilómetros (250 millas) al suroeste de Nueva Delhi.
Los rescatistas abrían los vagones con sopletes y levantaron los vagones con grúas, moviéndolos con cuidado para evitar que ningún trozo volcara y lastimara a los que estaban atrapados dentro.
Para el lunes por la mañana habían registrado los últimos de los 14 vagones accidentados, pero aún no habían levantado todos los módulos para ver si quedaban más cadáveres debajo.
“La operación de búsqueda en el lugar casi ha terminado. Digo `casi’ porque están intentando levantar los vagones con grúas y comprobar si hay cuerpos”, explicó el portavoz de Ferrocarriles Indios Anil Saxena.
“Sólo podremos estar seguros cuando el tren se haya levantado y retirado de la vía”. En el accidente murieron al menos 145 personas, de los que 116 estaban identificados, señaló el doctor Aneeta Singh, responsable médico del distrito de Kanpur Dehat, donde se encuentra el pueblo de Pukhrayan.
Unas 226 personas resultaron heridas, 76 de ellas con lesiones graves, dijo Ahmad. Personal médico prestó primeros auxilios cerca del lugar del siniestro y los afectados de más gravedad fueron trasladados a hospitales en Kanpur.
Familiares ansiosos buscaban a sus parientes entre los muertos y heridos en los hospitales de la ciudad. Las autoridades ferroviarias ordenaron una investigación sobre la causa del descarrilamiento.
Algunos medios locales dijeron sospechar de problemas en las vías. Los accidentes son relativamente frecuentes en la gran red ferroviaria india, la tercera más grande del mundo pero que carece de sistemas modernos de señalización y comunicaciones.
La mayoría de los accidentes se atribuyen a un pobre mantenimiento, equipo desfasado y errores humanos.