Santo Domingo. – El anunció del presidente Luis Abinader sobre la solución al problema del drenaje del Gran Santo Domingo solucionará los problemas derivados del cambio climático y las lluvias profusas.
Sin embargo, debe involucrarse a la sociedad toda y las acciones deben trascender las agendas políticas momentáneas.
Así lo aseguró el arquitecto, constructor y urbanista Edgar Martínez, quien sostuvo que “la prioridad debe ser el beneficio colectivo sobre intereses individuales o partidistas”.
El experto valoró positivamente el anuncio del mandatario y dijo que la iniciativa promete ser crucial para el fortalecimiento de la infraestructura.
“El objetivo es educir los riesgos vinculados a inundaciones y mejorar calidad de vida de los ciudadanos y la salud pública”, sostuvo.
Precisó que, para su efectividad, el enfoque del plan debe dirigirse a la mejora de la gestión del agua y del sistema de alcantarillado, respaldado como un compromiso de Estado.
“Esta mejora en la calidad de vida de los residentes podría repercutir positivamente en diversos sectores, incluyendo la salud, el medio ambiente y la economía local”, dijo.
Recordó que iniciativas del pasado se vieron truncadas por la falta de continuidad en el Estado.
Como ejemplos notables puso el Plan Director de Drenaje Pluvial para la ciudad de Santo Domingo de 1997 y el Plan de Saneamiento Ambiental para las Cuencas Media Baja Ozama-Isabela-Haina y el Litoral de Santo Domingo, de 1999.
Asimismo, el Informe Diagnóstico y Estudios Básicos para el Plan Maestro de Alcantarillados, de 2011.
“A pesar de su desarrollo durante la gestión anterior de la CAASD, este último se enfocó principalmente en el tratamiento de aguas residuales”, indicó.
El presidente Abinader anunció esta semana que el Gabinete de Construcción presentará un proyecto de alcantarillado para el Gran Santo Domingo para evitar las constantes inundaciones causadas por las lluvias.
