La reina Sofía de España.
Ciudad del Vaticano.- La reina emérita de España, doña Sofía, y el rey Felipe de Bélgica serán dos de las personalidades que acudirán mañana al funeral del papa emérito Benedicto XVI en el Vaticano, entre otras autoridades.
Las exequias, después de tres días de capilla ardiente, serán “solemnes” pero “sobrias” por expreso deseo del difunto, por lo que el Vaticano solo ha convocado a dos delegaciones de forma oficial, las de Italia y Alemania, el país natal de Joseph Ratzinger.
La delegación italiana estará encabezada por el jefe del Estado, Sergio Mattarella, y la primera ministra, Giorgia Meloni, al igual que la alemana, que estará guiada por el presidente, Frank-Walter Steinmeier, y su canciller, Olaf Sholz.
También asistirá una delegación de autoridades de la región natal de Benedicto XVI, Baviera, con su gobernador Markus Söder. España estará representada por la reina emérita Doña Sofía, que en el pasado mantuvo varios encuentros con el pontífice, acompañada por el ministro de la Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática, el socialista Félix Bolaños.
En la delegación también estará la embajadora de España ante la Santa Sede, Isabel Celaá, y varias autoridades religiosas como el cardenal y arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, presidente de la Conferencia Episcopal Española, entre otros.
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El funeral también contará con la presencia del rey Felipe de Bélgica. Asimismo, entre las autoridades políticas estará el presidente de Polonia, Andrzej Duda; el de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa; la de Eslovenia, Natasa Pirc Musar, y la de Hungría, Katalin Novák, mientras que el primer ministro, Viktor Orban, pasó este martes por la capilla ardiente.
Desde Francia, acudirá el ministro del Interior, Gérald Darmanin, y de Croacia, los titulares de Exteriores, Goran Grlic Radman, y de Cultura, Nina Obuljen Korzinek.
Ucrania, país en guerra desde el pasado febrero a causa de la invasión rusa, estará representada por el obispo Kenneth Nowakowski, en representación del primado de la iglesia greco-católica ucraniana, Sviatoslav Shevshuk, además de otras autoridades.
El Vaticano ultima ya los preparativos en la Plaza de San Pedro del funeral de Joseph Ratzinger, fallecido el pasado sábado con 95 años, una ceremonia que congregará a unos 60.000 fieles y que cuenta con más de mil periodistas acreditados de más de treinta países.
El rito funerario estará presidido por el papa Francisco y después, Benedicto XVI, que gobernó entre 2005 y 2013, será sepultado en la cripta de la basílica vaticana, en la tumba que perteneció a Juan Pablo II, cuyos restos reposan en la superficie del templo desde 2011.
