SANTO DOMINGO.-La imputada Elizabeth Silverio Silien compartía con su esposo, David Báez Zorrilla, el dinero que recibía por atender a los niños con trastornos del espectro autista (TEA) en el Centro de Terapias Neurocognitivas y Psicopedagógicas (Kogland).
Así consta en la solicitud de medida de coerción del Ministerio Público, que establece que Báez Zorrilla, fungía como administrador y personal autorizado a firmar en Kogland, junto a la imputada. Un padre pagaba RD$226 mil anuales por la colegiatura de la menor y 35 mil pesos por terapia. La pastora, Elizabeth Silverio Silien, dirigía el Kogland, contaba con una matrícula de 52 niños con trastornos del espectro autista (TEA), recibían atención por módulo nivelación académica.
El Ministerio Público acusa a Silverio Silien, de usurpar función de médico con exequatur y título falso, y estafar a los padres de los menores mediante consultas que realizaba, haciéndose pasar como doctora, neurocientífica, psicóloga y psicoterapeuta.
Laboró en 5 colegios
Silverio Silien, «la neurocientífica», se encuentra en prisión en el Centro Correccional y de Rehabilitación Najayo-Mujeres, laboró por tiempo efímero en cinco colegios bilingües como profesional de la educación, sin poseer título ni habilitación docente, según el Ministerio Público.
Los abogados de Silverio Silien, a la espera de la notificación de la resolución donde le imponen prisión como medida de coerción, para recurrir en apelación.
