Los ataques que tuvieron lugar este viernes en París volvieron a poner el foco sobre el grupo autodenominado Estado Islámico.
Los extremistas se atribuyeron la responsabilidad de los ataques, en los que murieron al menos 127 personas.
Además de sus tácticas brutales que incluyen asesinatos en masa, secuestros de minorías religiosas y decapitaciones difundidas en las redes sociales, Estado Islámico ha producido una ola de temor y odio en todo el mundo.
Pero, ¿qué es realmente Estado Islámico? ¿Quién lo financia? ¿Cuántos miembros tiene?
En BBC Mundo respondemos a éstas y otras preguntas.
¿Qué es y qué quiere Estado Islámico?
El grupo estableció un califato, que es una forma de Estado dirigido por un líder político y religioso de acuerdo con la ley islámica o sharia, que controla un territorio entre los Estados de Siria e Irak y que pretende recibir el apoyo total del mundo musulmán.
Aunque sólo tiene presencia en estos dos países, EI prometió «romper las fronteras» del Líbano y Jordania con el fin de «liberar a Palestina».
Ha pedido el apoyo de los musulmanes de todo el mundo y demanda que todos juren lealtad a su líder (califa), Abu Bakr al-Baghdadi.
¿Cuáles son sus orígenes?
Para buscar las raíces de Estado Islámico hay que remontarse a 2002, cuando el fallecido Abu Musab al-Zarqawi, un jordano creó el grupo radical Tawhid wa al-Jihad.
Un año después de la invasión liderada por EE.UU. en Irak, Zarqawi juró lealtad a Osama bin Laden y fundó al Qaeda en Irak, que se convirtió en la mayor fuerza insurgente durante los años de la ocupación estadounidense.
Sin embargo, después de la muerte de Zarqawi en 2006, al Qaeda creó una organización alterna llamada el Estado Islámico de Irak (ISI, por sus siglas en inglés).
ISI fue debilitada por las tropas de EE.UU. y por la creación de consejos Sahwa (Despertar), liderados por tribus sunitas que rechazaron la brutalidad de ISI.
Entonces en 2010, Abu Bakr al-Baghdadi se convirtió en el nuevo líder, reconstruyó la organización y realizó múltiples ataques en el país. En 2013 se unió a la rebelión contra el presidente sirio, Bashar al Asad, junto al frente al Nusra.
En abril de ese año, Abu Bakr anunció la fusión de las milicias en Irak y Siria y las bautizó como Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS, por sus siglas en inglés).
Los líderes del frente al Nusra, con el que habían combatido contra al Asad, rechazaron la decisión. Pero los combatientes leales a Abu Bakr lo siguieron en su empeño yihadista.
En diciembre de 2013, ISIS se enfocó en Irak y aprovechó la profunda división política entre el gobierno de orientación chiíta y la minoría sunita.
Ayudados por los líderes tribales, lograron controlar la ciudad de Faluya.
Pero el verdadero golpe lo dieron en junio de este año, cuando tomaron el control de Mosul, la segunda ciudad del país y continuaron su avance hacia la capital, Bagdad.
A mediados de julio habían consolidado su control sobre docenas de ciudades y localidades. En ese punto, ISIS declaró la creación del califato y cambió su nombre al de Estado Islámico.
¿Cuánto territorio controla EI?
Algunas estimaciones calculan que Estado Islámico y sus aliados controlan al menos 40.000 kilómetros cuadrados en Irak y Siria, casi el territorio de Bélgica.
Otros afirman que son cerca de 90.000 kilómetros cuadrados, el mismo espacio en el que reposa el Estado de Jordania.
Ese territorio incluye las ciudades de Mosul, Tikrit, Faluya y Tal Afar en Irak y Raqqa en Siria. Además de campos de petróleo, represas, carreteras y límites fronterizos.
Al menos ocho millones de personas viven bajo el control parcial o total de EI, que ha implementado una estricta interpretación de la sharia, forzando a las mujeres a llevar velo, obligando a los no musulmanes a convertirse o a pagar un impuesto, e imponiendo castigos que incluyen ejecuciones.
¿Cuántos combatientes pertenecen a EI?
Funcionarios de EE.UU. creen que Estado Islámico tiene alrededor de 15.000 milicianos activos.
Sin embargo, el experto iraquí en seguridad Hisham al-Hisham dijo a principios de agosto que podrían ser entre 30.000 y 50.000 los combatiendes de EI, de los cuales el 30% están por convicción, mientras que el resto han ingresado por coerción de los líderes del grupo.
Un considerable número de combatientes no son ni iraquíes ni sirios.
La consultora Soufan, especializada en investigación y seguridad en Medio Oriente, estimó que al menos 12.000 extranjeros integran las filas del ejército de EI, incluyendo unos 2.500 provenientes de los países de Occidente que han viajado a Siria e Irak en los últimos tres años.
¿Qué tipo de armamento tiene?
Los combatientes de Estado Islámico tienen acceso y son capaces de usar una gran cantidad de armamento, incluida artillería pesada, ametralladoras, lanzadores de cohetes y baterías antiaéreas.
En medio de su incursión militar capturaron tanques de guerra y vehículos blindados de los ejércitos sirio e iraquí.
Además han logrado tener un constante abastecimiento de munición que les permite tener armado a su ejército. Su poder de ataque en los recientes enfrentamientos con la Peshmerga (el ejército kurdo) en el norte de Irak sorprendió a muchos.
¿Cómo se financia?
Estado Islámico reportó tener unos US$2.000 millones en efectivo, convirtiéndose en el grupo insurgente más rico del mundo.
Al principio su apoyo llegaba de algunas personas naturales de los países árabes del Golfo Pérsico, como Qatar y Arabia Saudita.
Últimamente ha logrado convertirse en una organización sostenible financieramente, con autonomía, ganando millones de dólares por la venta de petróleo y gas de los campos que controla, de los impuestos que recauda en su territorio y algunas actividades ilícitas como extorsión, contrabando y secuestro.
Su ofensiva en Irak también fue bastante lucrativa, ya que obtuvo acceso al efectivo que se encontraba en los bancos de las principales ciudades que ha logrado controlar.
¿Por qué sus tácticas son tan brutales?
Los miembros de Estado Islámico son yihadistas que tienen una interpretación extremista de la rama sunita del islam y creen que ellos son los únicos creyentes reales.
Su visión del resto del mundo está basada en el hecho de son no creyentes que quieren destruir su religión, justificando de esa forma sus ataques contra otros musulmanes y no musulmanes.
Las decapitaciones, crucifixiones y asesinatos en masa han sido utilizados para atemorizar a sus enemigos. En medio de este panorama de horror, los miembros de EI justifican sus actos citando los versos del Corán que dicen algo como «golpear la cabeza» de los no creyentes.
De hecho, el líder de al Qaeda Ayman al-Zawahiri, quien rechazó las acciones de EI en febrero, le advirtió al califa que esas brutalidades le harían perder el «corazón y la cabeza de los musulmanes».
Esta nota se publicó originalmente en septiembre de 2014, poco después de las ejecuciones de los periodistas estadounidenses James Foley y Steve Sotloff.