JERUSALÉN.— El servicio de rescate israelí dijo que cohetes lanzados desde el Líbano el jueves mataron a otras dos personas en el norte de Israel, con lo que el total de muertes asciende a siete, en la más mortífera andanada de cohetes desde la invasión israelí del sur del Líbano.
El servicio de rescates Maguen David Adom dijo que quedaron confirmadas las muertes de una hombre de 30 años y una mujer de 60 en un suburbio de la ciudad norteña de Haifa. Los rescatistas atendieron además a otras dos personas que sufrieron heridas leves y fueron hospitalizadas.
El ejército israelí dijo que aproximadamente 25 cohetes cruzaron desde el Líbano como parte de una andanada que alcanzó un campo de olivos donde un grupo de personas estaba reunido para la cosecha.
El ataque ocurrió mientras varios diplomáticos estadounidenses de alto nivel estaban en la región para impulsar un cese al fuego en Líbano y Gaza con la esperanza de poner fin a las guerras en Medio Oriente, en los últimos meses de la administración del presidente estadounidense Joe Biden.
El grupo político-paramilitar Hezbollah ha lanzado cohetes, drones y misiles hacia Israel, y ha provocado ofensivas en represalia, desde que el ataque del 7 de octubre de 2023, perpetrado por Hamás desde la Franja de Gaza, desencadenó la guerra en el enclave. Hezbollah y Hamás son aliados respaldados por Irán.
El conflicto a lo largo de la frontera se intensificó hasta convertirse en una guerra total el mes pasado, cuando Israel lanzó una oleada de intensos ataques aéreos en Líbano y mató al líder principal de Hezbollah, Hasán Nasrala, y a la mayoría de sus adjuntos. Las fuerzas terrestres israelíes avanzaron hacia Líbano a principios de octubre.
El consejo regional de Metula informó sobre el ataque del jueves, sin detallar el número o tipo de proyectiles utilizados. Hasta el momento, se desconocen las nacionalidades de los trabajadores.
Metula, la ciudad más septentrional de Israel que colinda con Líbano en tres de sus partes, sufrió graves daños por los cohetes. Los residentes de la ciudad fueron evacuados en octubre de 2023, y solo permanecen allí fuerzas de seguridad y trabajadores agrícolas.
La Línea Directa para Refugiados y Migrantes, una organización que aboga por los trabajadores extranjeros, dijo que las autoridades los habían puesto en peligro al permitirles trabajar en la frontera sin la protección adecuada.
Las áreas agrícolas de la frontera de Israel, donde se ubican muchos de los huertos del país, son zonas militares cerradas a las que solo se puede ingresar con permiso oficial.
El recién nombrado líder principal de Hezbollah, el jeque Naim Kassem, dijo el miércoles, en un comunicado en video, que el grupo seguirá luchando contra Israel hasta que se le ofrezcan términos de cese al fuego que considere aceptables. Señaló que se ha recuperado de una serie de contratiempos en los últimos meses, incluidos ataques con buscapersonas y walkie-talkies explosivos, que muchas personas atribuyeron a Israel.
“Las capacidades de Hezbollah siguen disponibles y son compatibles con una guerra larga”, afirmó.
Más temprano el jueves, el ejército israelí advirtió a la gente que evacuara de más áreas del sur de Líbano, mientras que los ataques aéreos en diferentes partes del país provocaron la muerte de ocho personas, según la Agencia Nacional de Noticias de Líbano, administrada por el estado.
Israel ha advertido que se evacuen grandes áreas del país, incluidas las principales ciudades del sur y el este.
Más de 2.800 personas han muerto y casi 13.000 han resultado heridas en Líbano desde que comenzó el conflicto el año pasado, y cerca de 1,2 millones de personas han sido desplazadas, según el gobierno libanés.
En Israel, los cohetes, misiles y drones lanzados por Hezbollah han matado al menos a 68 personas, aproximadamente la mitad de ellas soldados. Más de 60.000 israelíes de pueblos y ciudades fronterizas han estado evacuados de sus hogares por más de un año.