Siempre y nunca

Siempre y nunca

Siempre y nunca

Lily Montaño.

Estos adverbios que enriquecen el lenguaje, nuestro idioma, probablemente sean un arma letal que mutila nuestras relaciones interpersonales al utilizarlos en ellas para lograr algo ¿por qué? Porque en las relaciones nada es absoluto desde la impermanencia en el tiempo hasta la evolución de las mismas.

En ocasiones el utilizar «siempre» y «nunca» a modo de reclamo o de sentencia se convierte en el cáliz desbordado y conclusión de esa relación y nosotros, ilusos en que al usar estas palabras nuestro prójimo cambie de actitud.

El comportamiento del ser humano es como un río que fluye y al que darle la oportunidad con la motivación y las palabras que no se vean como juicio, son un aliciente.

«Siempre» y «nunca» no dan la oportunidad a la apertura cuando tienen una connotación negativa, se convierte en un mandato que excluye cualquier movimiento de transformación y donde no hay posibilidad de construcción.

lilymontanogrullon@gmail.com