"Si Dios quiere": he ahí la clave

«Si Dios quiere»: he ahí la clave

«Si Dios quiere»: he ahí la clave

Mayra de Peña

Recientemente escuchaba un mensaje sobre la importancia que reviste, al momento de trazar los planes y metas en nuestra agenda de vida, el involucrar a Dios, ya que tal y como dice el Salmo 127:1 en la Biblia, “Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia”.

De ahí el gran valor que tiene el expresar con pleno convencimiento, a la hora de planear cualquier actividad, proyecto o meta, la frase ¨Si Dios quiere¨, pero ojo, no lo tengamos de muletilla, digámoslo conscientes del poder divino que desata esta prueba de fe y de dependencia con nuestro creador y Señor.

Es importante que entendamos que si dejamos que el Dios nos acompañe en cada uno de los grandes y pequeños momentos los resultados serán totalmente diferentes. No necesariamente tiene que darse como lo hemos pensado, Dios es soberano, lo que podemos estar seguro es que ocurrirá lo que a futuro entenderemos ha sido lo mejor para nosotros, pues ese gesto de humildad genuina, nos abre multitud de oportunidades.

Hagamos una costumbre el tener una constante relación con Dios, pidamos su consejo a la hora de toma de decisiones, no nos apresuremos, y sobre todo, pidamos a su Santo Espíritu que nos ayude a pedir como conviene.

Desarrollemos nuestra agenda de vida involucrando a Dios en cada detalle, eso también implica el compromiso de obedecer sus preceptos, el tener temor reverente hacia nuestro creador y soberano Dios, pero al mismo tiempo esto traerá sabiduría a nuestra vida, tranquilidad y confianza, valentía y coraje para vencer los retos y pruebas, y es que entonces sabremos que no luchamos solos y es que son tantas las cosas que podemos hacer juntos.

Recuerda, la palabra clave para dejar que las cosas fluyan, que los proyectos se materialicen y en medio de la tormenta tener paz; es reconocer que está en la sola Soberanía de Dios que lo que concierne a cada uno de nosotros…ocurra.

Por tanto baja tu ego, no olvides que tu inteligencia, destreza, fuerza, solvencia económica -si la tienes-, habilidad y cualquier otro valor agregado, proviene de Dios. Nada trajiste y nada material te llevarás, por tanto mengua para que Dios crezca en tu vida y afirma con toda propiedad en tu accionar: “Lo que me he propuesto sucederá… Si Dios quiere!



Mayra De Peña

Lic. en Contabilidad, egresada de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), graduada de Periodista, en el Instituto Dominicano de Periodismo (IDP). Locutora, con un Diplomado en Comercio Exterior, y Diplomado en Política Estratégica. He desempeñado diversas funciones dentro del sector Privado y Gubernamental. Hija de Dios y amante de la naturaleza. Creo en vivir a plenitud de manera equilibrada y en lo significativo de quererse y valorarse como individuo. Soy una feliz madre de tres hermosas hijas, creo en el matrimonio, en la institución familiar y en la importancia de predicar con el ejemplo. Amo escribir y con ello transmitir mi sentir y sobre todo tengo en alto estima alimentar el espíritu, pues de él mana la vida.