SANTO DOMINGO.-La Iglesia Católica condenó hoy la injusticia social, los feminicidios, la corrupción, la impunidad, los afanes reeleccionistas, los males en la justicia y los aumentos que se hacen funcionarios de algunas instituciones pese a que ellos mismos han dicho que no tienen recursos suficientes para hacer la labor que les compete.
En su tradicional Sermón de las Siete Palabras con motivo del Viernes Santo, que fue leído por seis sacerdotes y un diácono, la Iglesia deploró asimismo que las comunidades hayan optado por hacer justicia con sus propias manos.
Primera Palabra:
La Primera Palabra “Padre perdónalos porque no saben lo que hacen”, estuvo a cargo del padre Faustino Burgos, quien dijo que cada vez que los líderes políticos, religiosos o comunitarios no realizan sus servicios a favor del pueblo están “permitiendo que las conciencias duerman y aumente la impunidad y la corrupción”.
Dijo que el deseo de Jesús es ver la humanidad redimida, donde cada hombre y mujer, sea agente de su propia liberación, que consciente de sus derechos, cumpla con sus deberes y obligaciones, su deseo es que nadie se coartado.
Pidió perdón para aquellos «que promueven el odio, el rencor y la xenofobia, revestida de falso nacionalismo o falso pudor, creando intranquilidad y viendo fantasmas donde no los hay».
“Padre, perdónalos…es el grito de los que ya no aguantan más tanto oprobio, tanto odio, tanta violencia, tanta inseguridad, tantas injusticias”, dijo el religioso.
“Es posible que ante la situación actual por la que transitamos, de sálvese quien pueda, de violencia, de inseguridad, de tanta corrupción e impunidad en los distintos estratos de nuestra sociedad, pensemos, y nos cuestionemos: ¿puede o debe Jesús desde la cruz pedir perdón por aquellos que sin ningún reparo delinquen y siguen en ese agitado curso, transitando impunemente, aprovechándose de la debilidad de los más vulnerables, del pobre, del indigente, del inmigrante, del sin trabajo…, a sabiendas de lo que están haciendo?
Segunda palabra
“Conmigo en el paraíso”
El padre Miguel Amarante, quien tuvo a su cargo la segunda palabra consideró propicio el momento para pedir cambios en todas las esferas de la sociedad.
Tercera Palabra
“Mujer, ahí tienes a tu hijo”
Fue leída por el padre Nelson Acevedo, párroco de la Iglesia Santo Cura de Ars.
Acevedo dijo que el Estado está llamado a crear fuentes de trabajo para los jóvenes, quienes por falta de oportunidad vagan sin rumbo por las calles y muchos de ellos caen en los lazos fáciles de la delincuencia y las drogas, la cual se vende en las esquinas de los barrios como harina y sin ningún desparpajo.
Cuarta Palabra
Leída por el padre Vicente Sánchez Burgos
“Dios mío, por qué me has abandonado”
Es el grito de muchas personas que a diario ven pisoteada su dignidad, que sufren dolores e impotencia ante los abusos a los que son sometidos en sus lugares de trabajo, con sueldos de miseria, mientras observan cómo miembros de algunas instituciones del Estado quienes devengan sueldos de lujos, se hacen aumentos, a pesar de que han alegado que sus instituciones no tienen fondo para ejecutar las funciones para las cuales fueron creadas”.
Dios mío, Dios mío por qué me has abandonado es también la expresión de dolor del pueblo dominicano cuando observa a sus autoridades empeñadas más en asegurar su permanencia en los puestos de turno (más allá del período para el cual han sido electa legítimamente por los ciudadanos) que en gobernar y servir al pueblo que los eligió, explicó Sánchez Burgos.
Quinta Palabra
Leída por Erick W. Cosme,
“Tengo sed”
A juicio del padre Cosme el país tiene sed de una justicia más imparcial y equitativa, no “una justicia en dos niveles, para el grande y para el pequeño; no una justicia donde haya quienes estén exentos de toda culpabilidad legal y hasta moral
“Se nos está transmitiendo como meta-mensaje que si robas poco vas a la cárcel, pero si robas mucho no”.
Eso es lo que lamentablemente nos está llevando a tomar la justicia en nuestras propias manos
Cosme también se refirió a los feminicidios y dijo que nadie tiene derecho a matar a su pareja.
Sexta palabra
“Todo está cumplido”
Al leer la Sexta Palabra, el padre Roberto Martínez enfatizó que no se puede servir a Dios y al dinero (Lucas 16:13) y explicó la dificultad de los ricos para entrar al reino de los cielos.
Séptima palabra
“Padre en tus manos encomiendo mi espíritu”
El diácono José Rosado, de la parroquia San José de Calazán, dijo que la violencia ejercida por una persona, una institución o situación estructural se inserta cada día más queriendo crear una cultura de violencia a través de la incapacidad de resolver pacíficamente los conflictos, de las relaciones de poder, el dominio del saber, el militarismo, una cultura patriarcal, la discriminación, el racismo y la exclusión.
Sin embargo, dijo que la expresión de Jesús “En tus manos encomiendo mi espíritu” es un grito de victoria y una mirada hacia el futuro donde Él se convierte en piedra angular.
Es la victoria obtenida cuando exaltamos lo bueno, cuidamos el medioambiente, aprendemos a ser personas, luchamos como pueblo contra el abuso de poder y nos unimos para que la justicia se justa para todos, denunciamos el mal con nombre y apellido y anunciamos el bien con nombre y apellido.
