
NUEVA YORK.- Serena Williams lo dijo claramente: no es justo. Un deportista masculino jamás tendrá que tomar esa decisión.
Pero después de una carrera histórica que trasformó y trascendió su deporte, Williams, que el mes próximo cumple 41 años, ha dicho al mundo que dejará el tenis para concentrarse en tener un segundo hijo y que su primogénita, Olympia, sea una hermana mayor.
Su explicación en un largo artículo para Vogue repercutió entre las mujeres deportistas y de otras profesiones, muchas de las cuales comprendieron perfectamente sus palabras, “algo tiene que ceder”. Y a la idea de que no, una no puede tenerlo todo, al menos no todo al mismo tiempo.
