Nueva York.- En un partido que despertó gran expectativa, Serena Williams derrotó hoy a su hermana Venus 6-2, 1-6 y 6-3 para clasificarse la semifinal del Abierto de tenis de Estados Unidos.
«Es un gran momento, porque ella es la rival más dura que tuve en mi vida y una gran persona, es la mejor competidora, pero también mi mejor amiga», destacó la número uno del mundo todavía en el centro del estadio Arthur Ashe.
Serena Wiliams tomó la iniciativa en el partido. Su hermana empezó al saque y la campeona de 21 Grand Slams la puso en aprietos devolviendo los primeros servicios desde adentro de la cancha. Venus logró salvar un quiebre y empezó a sumar.
Como en cada partido de las Williams la potencia predominó. Venus aprovechó cada devolución corta de su hermana menor para meterse en la cancha y tratar de tomar la red o definir con una volea con swing.
Serena no se quedaba atrás, con sus tiros ganadores desde el fondo de la cancha y tratando de atacar con cada devolución. En el planteo Serena encontró más oportunidades de quiebre y concretó la primera con un globo de revés que fue festejado por un eufórico Arhtur Ashe. En 33 minutos la hermana menor se quedó con el primer set.
Las celebridades que se amontonaron en el Arthur Ashe disfrutaban de una gran Serena en el primer set. Oprah Winfried, reina de la TV estadounidense, la editora estrella de la revista Vogue, Anna Wintour, o el cómico Anzis Ansari gozaron de popularidad en las cuatro pantallas gigantes del estadio.
No tuvo el mismo cariño el magnate inmobiliario y candidato presidencial Donald Trump, abucheado en el tercer set.
Venus, de 35 años y campeona en el US Open en 2000 y 2001, siguió con su plan de juego y contó con la colaboración de Serena, que pasó de dos errores no forzados en el primer set a cometer once en el segundo, incluyendo una doble falta cuando tenía bola de quiebre en contra.
La mayor de las Williams ganó cinco juegos seguidos y mandó el clásico al set definitivo.
Allí volvió al partido la número uno del mundo, jugando con los mismos patrones del primer set, agregando un revés que demolió a su hermana. Serena Williams, de 33 años, no dudó para cerrar el partido y mostró un emocionante festejo después de conectar decimosegundo ace del partido.
«Este era un gran momento para Venus y para mí, estábamos jugando por un lugar en la semifinal de un Grand Slam, entonces mostré todas mis emociones», comentó la ganadora, que busca completar el Grand Slam calendario, es decir, conquistar los cuatro grandes del 2015.
A Serena le quedan dos partidos para igualar lo hecho por la alemana Steffi Graf en 1988. El próximo será ante la italiana Roberta Vinci, que tras derrotar por 6-3, 5-7 y 6-4 a la francesa Kristina Mladenovic jugará su primera semifinal de Grand Slam a los 32 años.
«Va a presentar un partido totalmente diferente a los últimos cuatro partidos que jugué. Ella no tiene mucho para perder, yo tampoco, así que va a ser divertido», pronosticó Williams, que busca su séptimo US Open.