Santo Domingo.-No hay torre que no podamos derrumbar, aseguró ayer el relevista dominicano Seranthony Domínguez, de los Filis de Filadelfia, refiriéndose a los Astros de Houston, sus rivales en la Serie Mundial.
Domínguez recordó que vienen de menos a más, ya que clasificaron en el último puesto del “wild card” de la Liga Nacional, y sin ser favoritos lograron vencer a los Cardenales (2-0); a los campeones vigentes Bravos de Atlanta (3-1) y a los Padres de San Diego (4-1).
“Estamos muy motivados para ganar, aquí (en los Filis) nadie está preocupado por los rivales, nosotros estamos concentrados en hacer nuestro trabajo, que es lo que importa”, explicó Domínguez, quien dijo que hoy el equipo sale para Houston, donde el viernes iniciarán la Serie Mundial.
Seranthony aseguró que en los Filis existe mucho optimismo por ganar la Serie Mundial, sin importar que los Astros sean considerados favoritos.
Resaltó que lo mejor de los Filis es que están jugando como una familia, dándose apoyo el uno al otro. “Estamos emocionados, y listos para aportar, al objetivo de ser los próximos campeones”, sentenció Domínguez.
Gran experiencia
El recio tirador dijo que en su debut en la postemporada la está pasando de maravillas. “Es algo increíble, un sentimiento bonito muy difícil de describir.
Lo que se vive en el dugout de los Filis es emocionante. El deseo de ganar de cada uno de nosotros es enorme”, manifestó Domínguez.
Para el derecho dominicano la participación en la Serie Mundial es el premio a casi tres años de trabajo intenso, mientras se recuperaba de la cirugía Tommy John, que lo limitó a 27 juegos en 2019, lo mantuvo fuera durante 2020 y apenas logró participar en un partido en 2021. “Sufrí mucho durante esos tres años, sin embargo, esto llegó como una bendición de Dios.
Trabajamos por esto y aquí estamos”, explicó el nativo de Esperanza, provincia Valderde.
Domínguez disfruta de una gran postemporada al compilar marca de 1-0, con efectividad de 1.17 en seis apariciones. Ha lanzado siete entradas y dos tercios, permitiendo apenas tres hits, una carrera limpia, con dos “holds” (ha mantenido la ventaja) y un salvamento.
Dijo que en la Serie Mundial estará listo para cuando el dirigente canadiense Rob Thomson elija su nombre para ir a lanzar, sin importar las circunstancia del juego.
Potencia
99.5 Millas por hora.
Promedia la bola rápida de Seranthony Dominguez durante su primera experiencia en la postemporada.