Durante todo el certamen, Emmy Peña repetía: “Dios habla por mi, camina por mi”.
BÁVARO.-Con emoción en la voz, visible cansancio y ojos acuosos, Emmy Peña conversó con nosotros la mañana siguiente a su coronación como Miss Mundo Dominicana 2021, en el Bávaro Convention Center, de la cadena de hoteles Barceló.
Con unas pocas horas de sueño, la que fuera candidata de la provincia Duarte, nos confesaba que “todavía no me lo creo” por la sensación irreal de todas las emociones que ha empezado a vivir, pero “si me lo creo” porque asegura ser el tipo de persona que se exigen mucho, pues “si hago algo quiero hacerlo mejor… todo lo mío siempre incluye hacer el 150 por ciento”.
Asegura que “será un triunfo, un honor y una bendición para ella traer corona del Miss Mundo al país”. Al responder unas sencillas preguntas, nos cuenta un poco de la mujer que representará la República Dominicana el próximo 16 de diciembre, en el Coca-Cola Music Hall, de San Juan, Puerto Rico.
¿Pensaste alguna vez que serías reina?
Realmente no. Eso es lo chistoso del caso, pues soy modelo profesional y nunca pensé que pudiera tener una banda, pero luego llega a mi lo que representa el Miss Mundo, ‘la belleza con propósito’ y esa realidad fue lo que me atrajo del certamen. De llevar el mensaje que la belleza va más allá de lo físico.
¿En qué se diferencia el modelaje del rol de una reina?
Hacer el “switch” de modelo a miss fue un reto para mi. La formación de modelo es buena porque te acostumbras a las cámaras y a estar frente a muchas personas, pero cuando estás en pasarela no es lo mismo interactuar como modelo que como miss. Como modelo eres un maniquí y te dicen tienes que ponerte esta ropa y venderla; pero como candidata, todo es como te sientas cómoda, tener clara tu esencia para poder proyectarla.
¿Cómo llega el modelaje a tu vida?
Desde muy pequeñita siempre quise ser modelo, a pesar que la Emmy original es bien tímida, callada y reservada. La oportunidad me llegó cuando viví en el Bronx, en Nueva York. Entré a la academia de Seliné Toribio, luego tuve la oportunidad de conocer a Jorge Diep y mi primera pasarela fue con sus diseños en el Fashion Couture en Nueva York.
¿Sentiste miedo de participar en el certamen?
Confieso que si, conmigo misma, pero nunca con la organización. Como es normal, cuando emprendes algo nuevo, puedes sentir miedo. Comencé a dejarlo atrás cuando me adentré en el concurso puede ver y sentir la profesionalidad del trabajo de equipo y el apoyo que día a día nos brindaban a todas las participantes.
¿Recibiste el apoyo de tu familia?
Estoy muy agradecida de mi familia. Mi madre viajó de los Estados Unidos para acompañarme esa noche. Me siento dichosa y bendecida de contar con un entorno que me apoya siempre me apoyan en todas las decisiones que he tomado y siempre quieren lo mejor para mí y verme triunfar.
¿Qué tipo de mujer eres y qué reina aspiras ser?
Puedo decirte que soy el tipo de mujer que, como los caballos de hipódromo, mira y camina hacia adelante, para atrás ni para tomar impulso.
Soy de decisión fuerte. Una mujer decidida. Por otro lado, creo que para ser reina, especialmente para Miss Mundo, es importante nunca perder tu esencia y mi esencia es ayudar, ser esa mano amiga, una mujer con decisión y lista para aprender porque ya tengo un compromiso con el país que es traer esa corona.
¿Qué causa social identificará tu reinado?
La inclusión es un tema muy importante para mí. Tengo un angelito con Síndrome de Down que es mi tío por parte de mi madre, Edwin Adolfo, y él fue la inspiración para mi proyecto de “Belleza con propósito”. Debemos romper esas limitantes porque lo que los hace a ellos realmente especial es lo que ellos nos enseñan a nosotros.
Ideas claras
—1— Importante
Educar a los padres para que puedan ayudar a sus hijos con Síndrome de Down.
—2— Creencia
Afirma que la educación es la base de todo.
—3— Dedicatoria
Dedica su corana a Dios porque él ha sido su guía y fortaleza en cada una de las cosas que emprende.
La elección de una buena candidata
Testimonio. “Como franquiciantes de Miss Mundo, nuestra responsabilidad es reclutar candidatas, hacer un evento, mandar una buena representante y cumplir con las obligaciones, tantos económicas como los reglamentos que ellos exigen.
Este es uno de los concursos más difíciles, para muestra solo basta con decir que, en los 50 años del certamen, solo hemos tenido una reyna y dos virreina”, nos cuenta Diany Mota, CEO de Miss Mundo dominicana. Desde hace 10 años, Mota es la cara de la franquicia dominicana, siendo en este periodo de tiempo cuando se han logrado la mayor cantidad de clasificaciones.
Afirma que, a diferencia de otros concursos, la magia de Miss Mundo es que su eje está en su lema “belleza con propósito” que anima a las candidatas a tener sus propias labores sociales. Esta mística le ha cambiado la vida a muchas jóvenes.
