KIEV, Ucrania.-Las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk pidieron ayer ayuda al presidente ruso, Vladímir Putin, para “repeler la agresión” militar por parte de Ucrania, según informó el Kremlin.
A la hora de recurrir a Rusia, los dirigentes separatistas se basan en los acuerdos de amistad, cooperación y asistencia mutua firmados el pasado lunes en el Kremlin después de que Putin reconociera la independencia de ambas repúblicas en el este de Ucrania, según la agencia oficial TASS.
Según explicó el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, en su solicitud las entidades rebeldes buscan evitar víctimas civiles y prevenir una “catástrofe humanitaria” en los territorios bajo su control.
Denuncian que la “continua agresión militar” por parte de Ucrania está destruyendo escuelas, hospitales, guarderías e infraestructura civil e industrial, y sesgando vidas humanas, incluidos niños.
“Las acciones del régimen de Kiev demuestran la falta de voluntad de poner fin a la guerra en el Donbás”, señalan. Los rebeldes acusan a las autoridades ucranianas de incrementar su presencia militar en la línea de separación de fuerzas, al tiempo que reciben apoyo internacional, incluido de Estados Unidos y otras potencias occidentales. “Kiev ha optado por una solución militar al conflicto”, insisten.
Putin pidió al Senado ruso autorización para enviar tropas al extranjero, es decir, al Donbás, presuntamente con fines de pacificación.
Por ello, el Consejo de Defensa y Seguridad Nacional de Ucrania impuso ayer el estado de excepción en todo el territorio nacional, con la excepción del Donbás -donde ya rige un régimen antiterrorista especial-, que fue ratificado por la Rada Suprema o Parlamento.
Además, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, anunció la movilización de los reservistas para completar a un Ejército que combate en dos frentes, el Donbás y la frontera. Zelenski se ha abstenido por el momento de la imposición de la ley marcial en el Donbás y de la ruptura de relaciones con Rusia, como le han demandado algunos políticos.
Posición de Ucrania
El ministro ucraniano de Exteriores, Dmitro Kuleba, pidió ayer más sanciones, más armas y más diplomacia, de forma simultánea, para defender a su país contra la agresión de Rusia y proteger así el orden mundial.
“Deben imponerse más sanciones, deben proveernos de más armas y deben multiplicarse las acciones diplomáticas”, dijo Kuleba tras intervenir ante la Asamblea General de la ONU en una sesión dedicada específicamente a esta crisis..
Repitió una y otra vez que las sanciones anunciadas el martes por Estados Unidos, la Unión Europea y el Reino Unidos “son apreciadas, pero no suficientes”, y que no cabe esperar a que los cohetes rusos caigan sobre el suelo ucraniano para imponer una nueva tanta de sanciones, pues “deben tener un efecto disuasorio”.
Ley del parlamento
— Amenaza
El Parlamento de Ucrania aprobó ayer la implantación del estado de excepción decretado por el presidente Volodímir Zelenski ante el agravamiento de la situación en el este del país y la amenaza militar rusa.