SANTO DOMINGO.-El Senado de República Dominicana debatirá este miércoles un proyecto de ley para validar la ciudadanía dominicana a los descendientes de haitianos que por orden del Tribunal Constitucional serán desnacionalizados.
La iniciativa enviada por la presidencia fue aprobada de urgencia en un solo día por la Cámara de Diputados el 16 de mayo y de ser ratificada por los senadores sólo necesitará su promulgación y la redacción de su reglamento de ejecución para entrar en vigencia.
Algunos senadores habían solicitado que, a diferencia de la cámara baja, el Senado se diera tiempo para analizar la pieza y enviarla a una comisión de análisis.
Pero Reinaldo Pared, presidente del Senado, anunció antes de la sesión que propondrá que el proyecto sea declarado de urgencia por la cámara alta para que no deba ser estudiado por una comisión y sea aprobado en dos jornadas consecutivas.
Pared, también secretario general del gobernante Partido de la Liberación Dominicana, explicó que la iniciativa no requiere de mayor estudio porque “ha sido ampliamente consensuado, ha sido aplaudido por toda la población y sectores”.
El proyecto de ley propone reconocer de manera automática la nacionalidad y los derechos adquiridos de los miles de descendientes de extranjeros, en su gran mayoría de origen haitiano, nacidos entre junio de 1929 y abril de 2007 de padres que no tenían permiso de residencia, siempre y cuando estén inscritos en el registro civil.
El Tribunal Constitucional respaldó en una sentencia inapelable de septiembre de 2013 el programa que realizaba el registro civil desde 2007 para retener los documentos de identidad de los descendientes de haitianos por considerarlos fraudulentos y ordenó abrir juicios individuales para anularles la nacionalidad.
La decisión del Tribunal generó críticas por parte de grupos de derechos humanos, como Amnistía Internacional, y de organismos internacionales como las Naciones Unidas, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, que consideraron que la desnacionalización dejaría como apátridas a decenas de miles de personas.
Los organismos de derechos humanos insisten, con base en una encuesta de Naciones Unidas, que 210.000 descendientes de haitianos perderán la nacionalidad, pero el registro civil asegura que sólo 24.000 personas serán afectadas y de ellas, 13.000 son de origen haitiano.
El proyecto enviado por el presidente Danilo Medina propuso que las personas que por diferentes razones nunca fueron inscritas en el registro civil puedan regularizarse como extranjeros y en un plazo de dos años opten por la naturalización.
