Joan Vargas 
Alijo y armas fueron presentados en diciembre por la Policía.
SANTO DOMINGO.– La implicación de seis agentes de la Policía en el “tumbe” de una indeterminada cantidad de cocaína que era parte de un alijo decomisado en San Cristóbal, obligó al Consejo Superior Policía a reunirse ayer.
La denuncia de un segundo teniente que participó en el decomiso de 337 kilos que llegaron procedentes desde Haití y que el camión que los transportaba supuestamente fue dejado abandonado, alertó a los altos mandos de la uniformada, que suspendieron a los agentes e iniciaron una investigación.
El oficial había informado que entregó a sus superiores el camión, marca Daihatsu, color blanco, placa número L225505, que cargaba al menos 50 sacos conteniendo la carga narcótica, la cual se presume eran más de 500 kilos.
Sin embargo, los agentes suspendidos, de los cuales no se establecieron los nombres ni rangos, solo reportaron 13 sacos.
Además de la droga, en el interior del camión ocupado se econtraron dos fusiles, uno color negro y otro negro con crema, tres cargadores, 68 cápsulas calibre M-16 y un juego de mecedoras.
