Cuando comenté ayer que a Leonel Fernández no le conviene para nada andarse exhibiendo con individuos de mala reputación, amigos comunes me comentaron que quizás algunos adversarios suyos dentro del propio PLD reaccionaban molestos ante el auge de su aspiración a ser electo por cuarta vez como presidente.
Pocas horas tras mi artículo, el Departamento del Tesoro anunció que ha “congelado” los bienes dentro de Estados Unidos del senador y secretario de organización del PLD, Félix Bautista, acusado por corrupción en obras de ingeniería en Haití luego del catastrófico terremoto de 2010.
La subsecretaria para Terrorismo e Inteligencia Financiera, Sigal Mandelker, dijo: “El senador Bautista usó su posición para incurrir en corrupción, incluyendo lucro con esfuerzos humanitarios en la reconstrucción en Haití”.
A mi parecer, faltan muchas cosas por verse que influirán notablemente la política dominicana de los próximos meses, y quienes crean que las habituales marrullas y triquiñuelas locales bastarán para resguardarse o salir adelante, pues están equivocados.
El “efecto Odebrecht” ayudará a higienizar muchos asuntos públicos querámoslo o no…
