Miguel Ángel Pérez lleva dos años sostenido con fijadores externos en su pierna derecha. Elieser Tapia
SANTO DOMINGO.-Personas con muletas, en sillas de ruedas, amputadas o con yeso en sus extremidades desfilan diariamente por las puertas de los hospitales, y cada una de ellas tiene una historia que contar.
Entre 2016 y 2017, el Instituto Nacional de Tránsito Terrestre (Intrant) registró más de 200 mil lesionados por accidentes de tránsito, donde el 75% involucraba a hombres .
Casi un 50% de los afectados tienen en común que están en edad productiva, de 20 a 49 años, y en la mayoría de los casos involucra a motociclistas que no usaban casco protector como lo exige la Ley de Tránsito, la cual impone una multa de mil pesos por no llevarlo.
Dentro de estos lesionados está Miguel Ángel Pérez Martínez, de 40 años, quien lamenta no haberse percatado de aquel carro que se detuvo de repente, contra el cual se estrelló en su motor en la autopista Las Américas, kilómetro 13. Ahí resultó con fracturas en el peroné y la tibia de la pierna derecha, quedando incapacitado hace dos años. Pérez dijo que está vivo porque llevaba puesto su casco al momento del accidente.
Luego de cinco cirugías y a la espera de una sexta, Miguel aun sigue batallando por su rehabilitación y también con la separación de su esposa e hijo de cinco años. La carga de los gastos médicos, quirúrgicos, transportación y sustento reposan sobre los hombros de su madre María Martínez, de 64 años, y sus hermanos, que con cierta frecuencia le ayudan.
Estadísticas
En el país existen más de cuatro millones de vehículos inscritos y por cada 100 mil conductores, 68 mueren en accidentes de tránsito, según datos del Intrant.
El Ministerio de Interior y Policía resalta que durante los últimos cinco años (hasta septiembre 2018) ocurrieron 10,485 colisiones con vehículos de motor.
De esta cantidad el 65% corresponde a motocicletas, siendo esta la principal causa que genera lesiones permanentes, según afirma Martín González, ortopeda del hospital Doctor Darío Contreras.
Se le acaban la fuerzas
Otro caso es el que vive Victoria Mota, de 62 años, quien expresó que se le acaban las fuerzas económicas y físicas para buscar una silla de ruedas prestada cada miércoles y así llevar a su hijo Cristian Jerez, de 38 años, para su cita médica.
Jerez se quebró el fémur izquierdo en un choque entre motores y ahora depende del sueldo de su madre como doméstica, pues dejó de trabajar como chofer de trasporte público luego del accidente.
Mota dice que no tiene la economía para gastar 400 pesos cada semana solo de transporte, desde su residencia en Vietnam, sector Los Mina, hasta el Darío Contreras, aparte de los medicamentos, pago por las consultas y agua para calmar la sed.
21 años sin empleo
Por otro lado está Clemente Marte, de 53 años, a quien le amputaron la pierna izquierda hace 21 años y desde entonces vive de los trabajos informales que realiza como mecánico automotriz, ya que nadie lo quiere contratar. Dijo sentirse excluido de la sociedad, ya que hace diligencias de trabajo sin ningún resultado.
Marte cuenta que fue atropellado por un conductor ebrio, quien le atrofió su pierna, mientras estaba parado en una acera a la espera de cruzar la calle. Hoy camina con ayuda de una muleta, “viviendo el día a día, conforme con Dios”.
Sobrepasan cobertura
El Consejo Nacional de Seguridad Social (CNSS) recientemente incrementó la cobertura hospitalaria para accidentes de tránsito, pasando de 488 mil pesos a más de 700 mil.
Sin embargo, la mayoría de los pacientes siempre exceden este monto, por los altos costos de las cirugías y los materiales ortopédicos, según dijo Pedro Rojas, director operativo del Ney Arias Lora.
Informó que la diferencia siempre es asumida por el centro de salud, lo que aumenta el presupuesto nacional.
Pese a la gran cantidad de alertas que realizan las autoridades e instituciones, el país sigue reportando altos índices de mortalidad y lesiones por accidentes de tránsito.
Inclusión
—1— Laboral
El 66% de discapacitados en edad productiva no trabajan, pese a que La Ley lo exige.
—2— Educación
El 16% de los casi 150 mil discapacitados, no ha asistido a ningún centro escolar.